Nueve países de la Comunidad firman una reforma de dudoso futuro

Nueve de los 12 países que forman parte de la Comunidad Europea (CE), entre ellos los recién llegados España y Portugal, estamparon ayer su firma al pie de la llamada Acta Única Europea, con la que se entreabre la puerta al proceso de reforma del Tratado de Roma con el objetivo de crear un verdadero espacio económico unificado. La abstención de Grecia, Italia y Dinamarca -a la espera de que los daneses se pronuncien en referéndum sobre el tema el próximo día 27- abre inesperados interrogantes sobre el futuro de la aplicación de este plan de reformas."La construcción europea avanza lentamente, ...

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Nueve de los 12 países que forman parte de la Comunidad Europea (CE), entre ellos los recién llegados España y Portugal, estamparon ayer su firma al pie de la llamada Acta Única Europea, con la que se entreabre la puerta al proceso de reforma del Tratado de Roma con el objetivo de crear un verdadero espacio económico unificado. La abstención de Grecia, Italia y Dinamarca -a la espera de que los daneses se pronuncien en referéndum sobre el tema el próximo día 27- abre inesperados interrogantes sobre el futuro de la aplicación de este plan de reformas."La construcción europea avanza lentamente, pero avanza", afirmó anoche el titular español de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, uno de los pocos ministros comunitarios que asistió al devaluado acto de la firma, en el que ni siquiera estuvo presente el presidente de la Comisión Europea, el francés Jacques Delors.

Las reformas amplían las posibilidades de adoptar decisiones por mayoría y refuerzan ligeramente los poderes del Parlamento Europeo. Asimismo, los doce se fijan como objetivos una unidad de acción en sus actividades diplomáticas y la "realización de una unión económica y monetaria".

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