El gobernador de Nador ordena que la reunión en apoyo a los musulmanes de Melilla se celebre en un local cerrado

El gobernador de Nador, Mohamed Tricha, ha ordenado que los actos convocados para hoy por el partido nacionalista marroquí Istiqlal en solidaridad con la comunidad musulmana de la vecina ciudad de Melilla se desarrollen "única y exclusivamente" en un local cerrado. Con ello se pretende, según fuentes próximas al gobernador, evitar "el riesgo de posibles incidentes por parte de grupos incontrolados que puedan poner en peligro las buenas relaciones existentes actualmente entre los Gobiernos de España y Marruecos".

Al mismo tiempo los musulmanes de Melilla han decidido no participar en est...

El gobernador de Nador, Mohamed Tricha, ha ordenado que los actos convocados para hoy por el partido nacionalista marroquí Istiqlal en solidaridad con la comunidad musulmana de la vecina ciudad de Melilla se desarrollen "única y exclusivamente" en un local cerrado. Con ello se pretende, según fuentes próximas al gobernador, evitar "el riesgo de posibles incidentes por parte de grupos incontrolados que puedan poner en peligro las buenas relaciones existentes actualmente entre los Gobiernos de España y Marruecos".

Al mismo tiempo los musulmanes de Melilla han decidido no participar en esta manifestación, en espera de los resultados de las conversaciones que mantiene su líder Mohamedi Dudú y representantes de la Administración.La policía gubernativa y un servicio de orden del Istiqlal, compuesto por 25 personas, se encargarán de controlar el acceso al cine Rif, situado en el centro de Nador y con una capacidad de 900 butacas de asiento, donde a partir de las 14.30 horas (15.30 de Madrid), comenzarán los actos programados. Éstos consistirán en una serie de intervenciones de dirigentes regionales del partido y de la Unión General de Trabajadores Marroquíes (UGTM), que cerrará el líder del Istiqlal, el ex ministro de Asuntos Exteriores, Mohamed Bucetta, desplazado ex profeso desde Rabat.

Las fuentes consultadas indicaron que sólo se permitirá el acceso de público al cine Rif hasta completar su aforo y que, a partir de ese momento, será la propia policía la encargada de evitar el paso de personas y una posible concentración ante la puerta. Al contrario que otro tipo de actos políticos, no se permitirá instalar un servicio de megafonía en el exterior para que el público que no consiga entrar en la sala si, en cambio, pueda seguir el desarrollo de las intervenciones desde la calle.

Por su parte, el enviado especial Carlos Gómez informa desde Melilla que no existe ningún plan especial de reforzamiento de los controles fronterizos, ni se va a incrementar el despliegue de fuerzas policiales en esta ciudad, según aseguró ayer el delegado del Gobierno en Melilla, que quitó importancia al acto de solidaridad con la población musulmana melillense -que calificó de simple asamblea- previstos para hoy en la vecina población marroquí de Nador.

La comunidad musulmana de Melilla, entre tanto, ha decidido no acudir a los actos de Nador. La comunidad musulmana, que ayer estaba más pendiente de las gestiones que realiza su líder, Aomar Mohamedi Dudú, en Madrid, para solucionar sus problemas de legalización, que de los actos de Nador, vive en los últimos días una calma tensa.

Las conversaciones de Dudú

Mohamedi Dudú -informa Emma Roig- se mostró "cordial y esperanzado" a la salida de la reunión que mantuvo ayer con el Defensor del Pueblo, Joaquín Ruiz Gimenez. Dudú anunció que todo estaba preparado para la reunión que mantendrá mañana con el subsecretario del Ministerio del Interior, Rafael Vera y con el director general de Política Interior, Rafael de Francisco, de las que se espera que se llegue al acuerdo de una Comisión mixta Administración-colectivo musulmán "para estudiar los problemas derivados de la integración jurídica de los musulmanes en Melilla".

Además, según explicaron fuentes cercanas al Defensor del Pueblo, es probable que Interior acepte la proposición de los musulmanes que piden que se les apliquen los ordenamientos jurídicos españoles, al margen de la Ley de Extranjería.

El principal punto de conflicto estribaba en que los musulmanes de Ceuta y Melilla rechazaban en su propuesta de diálogo a Rafael de Francisco y al delegado del Gobierno en Melilla, Andrés Moreno como interlocutores válidos.

Representantes de la Institución del Defensor del Pueblo fueron los encargados de conseguir que esta cláusula se eliminará de cara a las conversaciones del colectivo musulmán y la Administración.