Concedido un permiso de cinco días al ultra' Emilio Hellín

Emilio Hellín Moro, que cumple condena de 43 años en la prisión de Zamora como autor material de la muerte de Yolanda González, podrá disfrutar de un permiso de cinco días como consecuencia de la decisión del juez de vigilancia penitenciaria de Valladolid, con competencia sobre la provincia de Zamora, José Donato Andrés, a quien ha recurrido tras no haber obtenido ese permiso de la junta penitenciaria de la prisión de Zamora.

La comunicación oficial al centro para su puesta en libertad durante cinco días aún no ha sido enviada a la dirección de la prisión zamorana, pero fuentes de e...

Emilio Hellín Moro, que cumple condena de 43 años en la prisión de Zamora como autor material de la muerte de Yolanda González, podrá disfrutar de un permiso de cinco días como consecuencia de la decisión del juez de vigilancia penitenciaria de Valladolid, con competencia sobre la provincia de Zamora, José Donato Andrés, a quien ha recurrido tras no haber obtenido ese permiso de la junta penitenciaria de la prisión de Zamora.

La comunicación oficial al centro para su puesta en libertad durante cinco días aún no ha sido enviada a la dirección de la prisión zamorana, pero fuentes de este centro y del Gobierno civil han confirmado que Hellín Moro ya tiene una comunicación del juez de vigilancia autorizándole a ese permiso, que comenzará a disfrutar en el momento en que en la prisión se reciba la orden oficial correspondiente.Todas las fuentes consultadas coinciden en afirmar que quizá el retraso en el inicio de esas vacaciones se deba a que aún no se ha determinado a qué tipo de vigilancia policial se someterá a Hellín Moro, quien, al parecer, tiene intención de viajar a Murcia, donde reside su familia. La decisión ha causado malestar, según fuentes del Gobierno civil, ya que el pasado año, coincidiendo con las fechas navideñas, este mismo juez concedió un permiso de cuatro días a otros dos ultraderechistas internados en la prisión de Zamora: Carlos García Juliá, implicado en la matanza de Atocha y condenado a 28 años, e Ignacio Abad Velázquez, también implicado en el asesinato de Yolanda González, condenado en este caso a 30 años.

El día 22 de diciembre de 1984 los dos fueron puestos en libertad, pero los abogados de las acusaciones particulares en ambos procesos recurrieron ante la Audiencia Nacional, que revocó el acuerdo, por lo que fueron detenidos en Madrid pocas horas después de su salida de la prisión zamorana.