Tribuna:

El huerto

A la vista de cómo ha ido el debate sobre el estado de la nación cualquier espectador desapasionado ha podido llegar a la conclusión de que don Manuel Fraga Iribarne ha sido seducido en el huerto de la Moncloa mediante desconocidas promesas que, sin duda, van más allá de la concesión de la excelente cabeza del señor Calviño (la cabeza de Calviño es excelente por dentro y por fuera).Don Manuel se opuso ligeramente para demostrar que por algo es el líder de la oposición, pero había tanto acuerdo profundo en el fondo de sus ojos, tanta continencia en la relación pensamiento-palabra, tanto ...

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A la vista de cómo ha ido el debate sobre el estado de la nación cualquier espectador desapasionado ha podido llegar a la conclusión de que don Manuel Fraga Iribarne ha sido seducido en el huerto de la Moncloa mediante desconocidas promesas que, sin duda, van más allá de la concesión de la excelente cabeza del señor Calviño (la cabeza de Calviño es excelente por dentro y por fuera).Don Manuel se opuso ligeramente para demostrar que por algo es el líder de la oposición, pero había tanto acuerdo profundo en el fondo de sus ojos, tanta continencia en la relación pensamiento-palabra, tanto telemensaje de hoy por la mañana por mí que el misterio del pacto de la Moncloa adquiere una dimensión casi sobrenatural. A no ser que don Manuel haya sido burlado y se haya metido bromuro en el bocadillo de lubina sin otras promesas que la clave del laberinto de las sirenas. Lo cierto es que el jefe de la oposición ha perdido una inestimable oportunidad de actuar como tal ante la opinión pública y ha aparecido simplemente como el Pablo Castellano de la derecha del, PSOE. Lo que no es poco, pero por ese camino a lo más que se llega es a miembro del Consejo del Poder Judicial.

El público se ha quedado con la impresión de que Felipe González se sabe el Alanual de Economía Práctica de Miguel Boyer y Cómo ser jefe de Gobierno por correspondencia de Dale Carneige de memoria. Con la excepción de los representantes del grupo mixto, todos los demás habían estudiado las mismas asignaturas pero en otros libros, de ahí que, diciendo casi lo mismo, sin duda empleaban un vocabulario y un esquema lógico algo diferente. Al señor González sólo se le cortó el rollo cuando Bandrés le puso algunas objeciones muy sensatas para las que no estaba programado. Pero todos los votos que Bandrés o el grupo mixto le hayan podido quitar, el jefe de Gobierno los sigue compensando a costa de Alianza Popular: esa es su gran compañía aseguradora de votos. Para hacer tan. inútil papel opositor al menos han tenido que recibir a cambio la promesa de que se abolirán las leyes del divorcio, y del aborto y se declará la guerra al Polisario. De no ser así es que se los han llevado al huerto.

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