Los quintillizos de Barcelona, reunidos en la residencia del Valle de Hebrón
Anna, el único bebé de los quintillizos nacidos el pasado jueves que aún permanecía en la clínica Quirón de Barcelona junto a su madre, fue trasladada ayer a la residencia sanitaria del Valle de Hebrón, donde ya se encontraban sus otros cuatro hermanos.
El traslado ha sido posible dada la mejoría experimentada por la niña, pese a que se mantiene el pronóstico grave por insuficiencia respiratoria. Anna, la última de las cuatro niñas en nacer, sigue recibiendo tratamiento de suministro artificial de oxígeno. Su hermana Silvia sigue también asistida por respiración artificial y su esta...
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Anna, el único bebé de los quintillizos nacidos el pasado jueves que aún permanecía en la clínica Quirón de Barcelona junto a su madre, fue trasladada ayer a la residencia sanitaria del Valle de Hebrón, donde ya se encontraban sus otros cuatro hermanos.
El traslado ha sido posible dada la mejoría experimentada por la niña, pese a que se mantiene el pronóstico grave por insuficiencia respiratoria. Anna, la última de las cuatro niñas en nacer, sigue recibiendo tratamiento de suministro artificial de oxígeno. Su hermana Silvia sigue también asistida por respiración artificial y su estado es grave.
El único varón, Joan, que nació en quinto lugar y de forma sorpresiva, dado que en las últimas pruebas sólo se había descubierto la existencia de las cuatro niñas, sigue en estado muy grave, asistido también con respiración artificial. Las dos restantes hermanas, María y Cristina, continúan en estado de pronóstico reservado.
El traslado de Anna junto a sus hermanos se debe a que la madre, María Company, será dada de alta hoy y prefiere que sus hijos se encuentren en el mismo centro hospitalario para futuras visitas. Los médicos de la clínica Quirón habían desaconsejado hasta el momento el traslado, dado el grave estado en que se encontraba Anna.
El peso actual de los bebés, por orden de nacimiento, es el siguiente: María, 1.050 gramos; Cristina, 1.220; Silvia, 1.410; Anna, 1.100, y Joan, 1.280.