La tercera ampliación del Mercado Común

Chirac anuncia la intención de la oposición francesa de revisar el ingreso español

El acuerdo alcanzado por los dos países ibéricos para su ingreso en la Comunidad Económica Europea ha sido recibido y valorado con optimismo y satisfacción por los Gobiernos de Francia, el Reino Unido y la República Federal de Alemania. Sin embargo, el alcalde de París, Jacques Chirac, declaró ayer que si la oposición francesa ganara las próximas elecciones legislativas, "la entrada de España y Portugal en la CEE sería renegociada".

"Francia se alegra de la adhesión de España y de Portugal a la CEE. Se ha dado un gran paso que marca una nueva etapa. Europa estará ahora más equilibrada d...

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El acuerdo alcanzado por los dos países ibéricos para su ingreso en la Comunidad Económica Europea ha sido recibido y valorado con optimismo y satisfacción por los Gobiernos de Francia, el Reino Unido y la República Federal de Alemania. Sin embargo, el alcalde de París, Jacques Chirac, declaró ayer que si la oposición francesa ganara las próximas elecciones legislativas, "la entrada de España y Portugal en la CEE sería renegociada".

"Francia se alegra de la adhesión de España y de Portugal a la CEE. Se ha dado un gran paso que marca una nueva etapa. Europa estará ahora más equilibrada desde todós los puntos de vista, tanto geográficos como culturales o económicos", afirmó el portavoz del presidente de la República francesa pocas horas después de que se conociera el final feliz de las negociaciones de Bruselas.Los ministros franceses se han esforzado por acentuar el carácter histórico de la jornada y por poner de relieve los aspectos positivos de la ampliación. Catherine Lalumière, encargada de los Asuntos Europeos, afirmó que el acuerdo "permite tener una visión optimista de Europa". La entrada de España y de Portugal ayudará a asentar la democracia en esos idos países, añadió. La ministra insistió en que las reivindicaciones francesas habían sido escuchadas.

Su colega, el titular de Agricultura Michel Rocard, que tiene que hacer frente a la reacción de los agricultores, explicó por su parte, que los aspectos políticos habían pesado mucho: "hace 12 años España y Portugal solicitaron su adhesión a la CEE y los países comunitarios se negaron a abrirles la puerta a causa de su escandaloso sistema político. Algún tiempo después los dos países se transformaron en democracia. Ya no había argumentos en contra, sino a favor"

El presidente de la Federación Nacional de Sindicatos Agrícolas y Ganaderos, François Guillaume, pidió que el tratado de ampliacion sea sometido a un referéndum nacional, tal y como sucedió en el caso de Gran Bretaña. El líder sindical no sacó a relucir, sin embargo, toda su artillería. Para Guillaume, el principal problema no es tanto el contenido del tratado como las garantías de que va a ser cumplido. "Ya sabemos lo que dan de sí los compromisos escritos. Ahí están el Reino Unido e Italia, que los interpretan después como quieren". Esta es la misma teoría que defiende el representante de los viticultores del sur de Francia.

En un segundo plano

Mitterrand procura, sin embargo, no dejar traslucir demasiado su satisfacción. Se cuenta que cuando el ministro de Asuntos Exteriores, Roland Dumas, le preguntó si quería resolver él mismo la última discusión en la cumbre de jefes de Gobierno contestó: "Roland tú tienes que ser popular en España y yo en Francia".

Por su parte, el Gobierno británico ha calificado de "momento histórico en la historia de Europa" el acuerdo conseguido entre España y Portugal y la CEE que garantiza la entrada de los dos países ibéricos en el Mercado Común en la fecha prevista de 1 de enero de 1986, siempre que Grecia no haga valer sus reservas, informa Carlos Mendo desde Londres.

El ministro de Estado para el Foreign Office, Malcolm Rifkind, declaró que el Reino Unido "daba la bienvenida a la entrada de España y Portugal en las Comunidades" y calificó los términos del acuerdo de "honorables". "La feliz conclusión de las negociaciones es de la máxima importancia no sólo para el Reino Unido síno para todos aquellos que se preocupan por los intereses de Europa al mismo tiempo que supone un tremendo estímulo para el reforzamiento de la democracia parlamentaria representada de forma única por la Comunidad Europea", manifestó Rifkind.

El Gobierno de Bonn se mostró también "extraordinariamente satisfecho" por el éxito de las negociaciones. La noticia, según informa José Comas, abrió ayer todos los telediarios y noticiarios radiofónicos. Poco más tarde de las 19 horas, la emisora Deutschlandfunk realizaba una entrevista con el embajador de España en Bonn, Eduardo Foncillas, que sacó a relucir el término "histórico", que se empleó a lo largo de todo el día. En una entrevista radiofónica, el ministro de Exteriores, el liberal Hans-Dietrich Genscher recordaba que "yo soy el único entre mis colegas que estuve en esta negociación desde el principio, hace ocho años. Fue un trabajo difícil, pero también un gran éxito para todos. Se ha demostrado que la Comunidad Europea, a la que tanto se critica, está en condiciones de tomar decisiones importantes".

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