La Guardia Civil rescata a la niña secuestrada en la maternidad de Santa Cristina

La Guardia Civil de Fuenlabrada (Madrid), alertada por una mujer de esta población, que se extrañó al ver a una vecina con una niña depocos días, rescató ayer a la pequeña secuestrada el domingo en la maternidad Santa Cristina, de Madrid. Fuentes de la Guardia Civil informaron que la detenida es Ángeles Vidales Alfaro. Se trata de una mujer madura, algo disminuida psíquicamente, separada de su esposo y madre de cuatro hijos. La niña estaba anoche en una incubadora.

La detención se realizó a primeras horas de la tarde, al saber se que la mujer sobre la que recaían las sospechas adquirí...

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La Guardia Civil de Fuenlabrada (Madrid), alertada por una mujer de esta población, que se extrañó al ver a una vecina con una niña depocos días, rescató ayer a la pequeña secuestrada el domingo en la maternidad Santa Cristina, de Madrid. Fuentes de la Guardia Civil informaron que la detenida es Ángeles Vidales Alfaro. Se trata de una mujer madura, algo disminuida psíquicamente, separada de su esposo y madre de cuatro hijos. La niña estaba anoche en una incubadora.

La detención se realizó a primeras horas de la tarde, al saber se que la mujer sobre la que recaían las sospechas adquiría un biberón y medicamentos con los que se trasladó a su domicilio de la calle Austria, de Fuenlabrada Allí fue detenida Ángeles Vidales y encontrada la niña.Los vecinos de la urbanización Parque Nuevo, donde está situada la calle de Austria, informaron que la detenida, que vive desde hace unos dos años con un hombre más joven que ella llamado Alberto, llevaba embarazada "cuando menos 14 meses".

Siempre estaba con lo mismo, que si ahora estoy embarazada, que si he tenido un aborto", repetían incansablemente a las personas que la conocían.

"Se debía poner una almohada para aparentar la tripa", dijo una vecina, que aseguró haberla visto el pasado sábado por la mañana en la pescadería ostensiblemente embarazada. La misma persona declaró que la vio por la noche al salir a tirar la basura, vestida con un chándal y mucha menos tripa.

La detenida informó el pasado lunes a la gente del bloque donde habita que había tenido tina niña en el hospital de Móstoles. Al principio nadie se extrañó demasiado, e incluso algunas mujeres pasaron a saludar a la madre y a la recién nacida. La supuesta madre les informó de lo contento que estaba su compañero y lo bien que había ido el parto. Angelines, que tiene cuatro hijos, tres de ellos varones, quería tener una niña a toda costa, según fuentes próximas a la familia, porque su hija vive con su marido.

Hacia las 20.15, Fernando de la Torriente, director de la Casa de Salud y Maternidad de Santa Cristina, informó que la pequeña había sido ingresada en una incubadora de la UVI, donde permanecerá durante 24 horas. La exploración física de la niña, dijo De la Torriente, ha revelado que presenta buen aspecto general y que ha sido bien alimentada, pese a que padece una discreta hiperexcitabilidad y también hipotermia o temperatura rectal por debajo de lo normal. Esas anomalías se explican por el hecho de haber -sufrido un traslado y cambio de domicilio al poco de nacer.

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La identificación de la niña se realizó a partir de una camiseta marcada que traía y que es de uso habitual en esa maternidad, y el testimonio del personal del centro y de la madre.

El director de la maternidad añadió que el centro tuvo conocímiento, hacia las 17.30, de que la Guardia Civil había trasladado a una niña a la ciudad sanitaria La Paz, y que esa niña tenía características similares a la que el pasado día 3 había sido secuestrada Desde La Paz la niña fue trasladada a la maternidad a las seis de la tarde.

José Manuel Fernández Pardo, padre de la niña rescatada, agradeció a los informadores lo que, en su opinión, ha sido una participación decisiva en la solución del caso. Fernández Pardo señaló que las informaciones facilitadas por la Prensa fueron la causa de que la vecina de la secuestradora se alarmara al escuchar en su casa los lloros de una niña, cuando sabía que la vecina no había estado embarazada recientemente.

Fernández Pardo no pudo asistir al nacimiento de su hija el pasado sábado por encontrarse encarcelado en Carabanchel y no por encontrarse trabajando en una obra en Guadalajara como él mismo dijo anteayer. Fuentes penitenciarias informaron que a Fernández Pardo, recluido en situación preventiva como presunto autor de un robo menor, se le había concedido un permiso de 72 horas para conocer a su hija.

El padre de la niña informó ayer que las primeras sospechas de los investigadores del caso, los funcionarios del grupo de Policía Judicial de la comisaría de la Estrella, se dirigieron hacia él, su padre y un primo. Los investigadores tenían una descripción física bastante completa de la secuestradora y también sus huellas dactilares, despositadas en un vaso de agua que bebió instantes antes del secuestro.

La madre de la niña, Mari Loles Vargas, según su tía Victoria, estaba interesada ayer por la mañana en enviar a través de los periodistas un mensaje a la secuestradora, y no tenía inconveniente en ser entrevistada y fotografiada en la habitación, 207 donde permanece desde el parto. Sin embargo, el director del centro, Fernando de la Torriente, manifestó que "el centro no lo puede permitir por prescripción facultativa". La dirección del centro de maternidad mantuvo la misma actitud después de que la niña fuese entregada a su madre.

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