Tribuna:

Caminos del campo infinito llevadme otra vez a casa

La bolsa se está poniendo muy bonita para ganar dinero..., o para perderlo, comentaba ayer un operador, medio en serio o medio en broma, al término de la última sesión de la tanda semanal. Pero los analistas, ante la reciente evolución del mercado, distancian sus previsiones, como ya es habitual en estas situaciones.Aquellos técnicos que habían previsto el tirón de los bancos, ya hace más de una semana, no caben en sí de gozo. Aquellos que no hicieron caso del chart intentan digerir ahora sus títulos eléctricos esperando una reacción que no debe hacerse esperar demasiado. La polémica, d...

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La bolsa se está poniendo muy bonita para ganar dinero..., o para perderlo, comentaba ayer un operador, medio en serio o medio en broma, al término de la última sesión de la tanda semanal. Pero los analistas, ante la reciente evolución del mercado, distancian sus previsiones, como ya es habitual en estas situaciones.Aquellos técnicos que habían previsto el tirón de los bancos, ya hace más de una semana, no caben en sí de gozo. Aquellos que no hicieron caso del chart intentan digerir ahora sus títulos eléctricos esperando una reacción que no debe hacerse esperar demasiado. La polémica, de todas formas, es compleja.

Los defensores del repunte bancario apuestan no sólo a muy corto plazo, aunque tampoco presentan muchas seguridades a medio, en vista de la modificación de las reglas del juego para las entidades bancarias. A los ya conocidos argumentos sobre la rentabilidad de estos valores, dada su pobre elevación en lo que va de año, unen ahora las también sabidas disminuciones en el coeficiente de pagarés del Tesoro y de inversiones y, por supuesto, la continuación de las previsiones alcistas del análisis técnico.

Estos mismos analistas, por el contrarío, auguran un duro futuro para los valores eléctricos, sobre los que predicen un estancamiento a los niveles actuales. Este pronóstico se basa en las modificaciones previstas por la Administración en lo que se refiere a las amortizaciones, activación de intereses y cobertura de riesgo de cambio, loque incrementa la posibilidad -aunque no lo determine- de que los dividendos se vean rebajados. Las afirmaciones de los responables de Energía, en el sentido de que no habrá problemas si las compañías realizan los intercambios de activos, no han tranquilizado mucho a los operadores.

Como dando la razón a todos estos argumentos, los bancos continuaron ayer su escalada, aunque con menos fuerza que el día anterior. El saldo por caja para las siete mayores entidades se situó en 323.616,títulos a la compra, casi 100.000 acciones menos que el jueves. Las eléctricas, por su parte, descendieron en conjunto 1,11 puntos, frente a la pérdida de 2,69 puntos de la jornada precedente.

Esta flexibilización de la tendencia indica que la fase actual puede modificarse en las primeras jornadas de la semana próxima. Muchos operadores están aprovechando la bajada eléctrica para posicionarse en estos valores, lo que indica una confianza en el futuro del corro.

De todas formas, la semana que entra estará presidida desde el primer momento por el inicio de la ampliación de Telefónica, valor que lleva perdidos nueve puntos en la tanda actual, frente a una ganancia de 8,5 en la semana anterior. La dimisión del director general de la compañía, Pedro Higuera, ha sido interpretada en la bolsa como producto de distensiones ante el posible enturbiamiento de las relaciones con la multinacional norteamericana AT&T, aunque parece que los tiros no van exactamente por ahí. Los primeros días de la ampliación, por consiguiente, no se prevén demasiado favorables para las intenciones de la empresa de comunicaciones.

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