Siria quiere retirar 12.000 soldados de territorio libanés

Siria "desea retirar, en el momento que las circunstancias lo permitan, 12.000 soldados de Líbano", según ha declarado el ministro sirio de Información, Yasin Rajuh. El ministro seña a que esas tropas son necesarias en Siria.En una entrevista concedida al rotativo As Safir, uno de los principales periódicos de Líbano, el ministro Yasin Rajuh dice que "es imposible para las fuerzas sirias volver a las regiones libanesas para mantener el orden; necesitamos a nuestros soldados dentro de nuestras fronteras y para cumplir tareas nacionales". El ministro sirio de Información no especifica de ...

Siria "desea retirar, en el momento que las circunstancias lo permitan, 12.000 soldados de Líbano", según ha declarado el ministro sirio de Información, Yasin Rajuh. El ministro seña a que esas tropas son necesarias en Siria.En una entrevista concedida al rotativo As Safir, uno de los principales periódicos de Líbano, el ministro Yasin Rajuh dice que "es imposible para las fuerzas sirias volver a las regiones libanesas para mantener el orden; necesitamos a nuestros soldados dentro de nuestras fronteras y para cumplir tareas nacionales". El ministro sirio de Información no especifica de qué parte de Líbano serían retirados los soldados ni habla sobre el futuro de las tropas sirias destacadas en Líbano, calculadas en unos 30.000 hombres.

En el mismo momento en que se publicaba la entrevista, veinticuatro horas después de la visita del presidente libanés, Amín Gemayel, a Sidón, la capital del sur de Líbano que el Ejército israelí evacuó el sábado, tras 32 meses de ocupación, varios centenares de integristas shiíes, probablemente afiliados al Partido de Dios, se hicieron durante tres horas con el control de la ciudad, informa Ignacio Cembrero.

Llegados de la capital libanesa en un grupo de más de 300 automóviles, los milicianos, armados hasta los dientes con fusiles de asalto Kalashnikov y lanzagranadas, arrancaron las banderas libanesas colocadas en los parabrisas de los coches y en las lunas de los comercios y desgarraron los retratos del jefe del Estado, al que califican de nuevo sha.

Durante la ocupación de la tercera aglomeración urbana de Líbano, los asaltante se ensañaron con Gemayel, de religión católica maronita, coreando eslóganes como "Sidón es musulmana y no puede ser dirigida por un maronita".

Los integristas islámicos saquearon cafeterías y tiendas de ultramarinos que vendían alcohol, al tiempo que colocaban en las paredes fotografías del ayatollah Jomeini.