El mensaje de Reagan

El gran discurso de Ronald Reagan de inauguración de su segundo mandato constituirá un documento de un especial estado de conciencia norteamericana que será citado con frecuencia; claro está que el discurso ofrece motivos para una crítica ideológica: el país está en una situación tan poco envidiable que solamente con tales discursos se puede estimular. Además, esa invocación de Reagan a una segunda revolución norteamericana puede corresponder a un rico invento de relaciones públicas. ( ... )Sin embargo, ningún discurso presidencial desde hace décadas puede referirse con tanta razón a un hecho ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El gran discurso de Ronald Reagan de inauguración de su segundo mandato constituirá un documento de un especial estado de conciencia norteamericana que será citado con frecuencia; claro está que el discurso ofrece motivos para una crítica ideológica: el país está en una situación tan poco envidiable que solamente con tales discursos se puede estimular. Además, esa invocación de Reagan a una segunda revolución norteamericana puede corresponder a un rico invento de relaciones públicas. ( ... )Sin embargo, ningún discurso presidencial desde hace décadas puede referirse con tanta razón a un hecho innegable: dos siglos después de la revolución norteamericana ese gran proyecto es todavía válido, y el poder de estimulación utópico de la Constitución no sólo no se ha marchitado, sino que puede continuar hacia adelante.

De esta fe hace uso Ronald Reagan. América está destinada a la grandeza, no es una conspiración de la Divina Providencia, sino una dura realidad, también para los que no son norteamericanos. La política económica de Reagan no ha transcurrido como una línea recta. Pero puede hacer alarde que la baja de impuestos al principio de su mandato ha jugado un papel estimulante para la economía y que quiere reducir a un 35% el límite de los impuestos a las rentas e ingresos. ( ... )

8 de febrero

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En