TRIBUNALES

El abogado Carlos Aguirre de Cárcer reconoce ante el juez al policía que le golpeó

El abogado Carlos Aguirre de Cárcer identificó ayer, entre ocho personas, en un reconocimiento en rueda celebrado en el Juzgado de Instrucción número 23, al inspector de policía Carlos Ramos Goris como la persona que le empujó y abofeteó cuando el abogado intentaba impedir que un policía nacional golpeara a una persona en el suelo, ensangrentada y esposada. Igualmente reconoció a Máximo Jiménez Campos como el policía agresor y al inspector José Vázquez Novoa como la persona que en comisaría le propuso que no presentara denuncia porque, de lo contrario, buscarían indicios de inculpación en su c...

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El abogado Carlos Aguirre de Cárcer identificó ayer, entre ocho personas, en un reconocimiento en rueda celebrado en el Juzgado de Instrucción número 23, al inspector de policía Carlos Ramos Goris como la persona que le empujó y abofeteó cuando el abogado intentaba impedir que un policía nacional golpeara a una persona en el suelo, ensangrentada y esposada. Igualmente reconoció a Máximo Jiménez Campos como el policía agresor y al inspector José Vázquez Novoa como la persona que en comisaría le propuso que no presentara denuncia porque, de lo contrario, buscarían indicios de inculpación en su contra y no podría salir en libertad. Los testigos afirmaron que el abogado no había insultado ni agredido a los policías.

El abogado dijo que otra persona que también le hizo la misma proposición no estaba presente en el juzgado, aunque cree que podría reconocerlo.La versión facilitada por la policía en su día fue la siguiente "Apareció un hombre acompañado de una chica y se encaro con el policía, al que insultó y recriminó su actuación a la vez que le propinaba pequeños empujones. Tras exhibir un carné del Colegio de Abogados, solicitó la documentación a los funcionarios policiales, exigiendo que, bajo su responsabilidad, se quitaran las esposas al detenido. Al ser invitado a que se apartara y no obstaculizar la labor policial, se negó a ello y se originó un pequeño forcejeo en el que resultó lesionado un inspector del Cuerpo Superior de Policía".

Las diligencias judiciales, que se iniciaron a las 11 horas, se prolongaron durante ocho horas. En primer lugar declararon los testigos presenciales. Dolores Torrano, encargada de la barra americana Kiokay, que fue la persona que llamó a la policía, dijo que no vio que el abogado insultara o agrediera a los policías porque estaba pendiente del detenido, que había alborotado en el local.

El otro testigo, Luis Alberto Texeira, de nacionalidad portuguesa y cliente de la barra americana, se desdijo de sus manifestaciones en comisaria y negó que el abogado hubiera gritado "policía asesina". Añadió que sí vi cómo un señor de paisano pegaba un fuerte empujón al abogado lanzándolo contra un coche. Texeira reconoció que ha sido detenido en tres ocasiones y que tiene permiso de permanencia en España que antes le renovaban en la comisaría de Centro, donde prestaron la declaración, y ahora en la Brigada Regional de Fronteras y Extranjeros, en la calle Los Madrazo. Los dos testigos afirmaron que habían prestado declaración juntos delante de los inspectores Ramos y Vázquez, implicados en el incidente.

El policía nacional Máximo Jiménez aseguró ante el juez que el abogado les llamó "asesinos" y, a las preguntas del magistrado de por qué no lo había hecho constar anteriormente, respondió que se le había olvidado. Precisó que el abogado le había dado pequeños empujones y que un inspector le separó. Negó haber golpeado al detenido Juan Francisco Tebar y explicó que las lesiones se las produjo en una caída durante la persecución policial.

Los inspectores Ramos y Vázquez afirmaron que llegaron al lugar de los hechos al mismo tiempo que el abogado, que les conminó a que soltaran las esposas al detenido. Le dijeron que se separara y en un primer momento así lo hizo, pero volvió de nuevo y en un forcejeo Ramos resultó lesionado en una mano. Los inspectores precisaron que el abogado no tenía intención de agredirles y admitieron que no les insultó. Ramos negó que empujara y abofeteara al letrado y que no se explicaba la razón de que un testigo así lo afirme. Vázquez dijo que un hombre sin identificar, que dijo ser abogado, había intervenido, aunque luego admitió que le conocía por asistencias a detenidos en comisaría.

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