Expediente a un funcionario de la cárcel de Carabanchel con motivo de la muerte de un preso
La Dirección General de Instituciones Penitenciarias ha abierto expediente de corrección disciplinaria y suspensión provisional de funciones al responsable de la séptima galería de la cárcel de Carabanchel hasta que se aclaren las circunstancias de la muerte del recluso de nacionalidad nigeriana Abiorah Amechi Amebo, ocurrida el pasado día 1.
El incidente provocó el motín de unos 20 presos nigerianos y árabes, ya que el compañero de celda del fallecido asegura que estuvo llamando durante dos horas al funcionario sin que éste le prestara atención. Amechi Amebo se econtraba indispuesto, p...
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La Dirección General de Instituciones Penitenciarias ha abierto expediente de corrección disciplinaria y suspensión provisional de funciones al responsable de la séptima galería de la cárcel de Carabanchel hasta que se aclaren las circunstancias de la muerte del recluso de nacionalidad nigeriana Abiorah Amechi Amebo, ocurrida el pasado día 1.
El incidente provocó el motín de unos 20 presos nigerianos y árabes, ya que el compañero de celda del fallecido asegura que estuvo llamando durante dos horas al funcionario sin que éste le prestara atención. Amechi Amebo se econtraba indispuesto, posiblemente por haberse inyectado heroína en mal estado, y falleció durante el traslado al hospital General Penitenciaro.La Dirección General de Instituciones Penitenciarias hizo público ayer un comunicado en el que se informaba que la investigación abierta sobre el caso revela diversas irregularidades en la actuación de los funcionarios. Entre estas irregularidades se encuentra una cena de funcionarios no autorizada, que se celebró durante la noche de fin de año, y el presunto incumplimiento grave de deberes por parte del funcionario responsable de la galería donde falleció el nigeriano.
El comunicado hecho público informa que se han apreciado irregularidades, que no se especifican, en la organización y distribución de los servicios del establecimiento penitenciario. En el informe consta también que un interno del centro tuvo que poner una inyección al súbdito nigeriano antes de su traslado al hospital General Penítenciario, en lugar de hacerlo el personal facultativo de la prisión. Los hechos se han puesto en conocimiento de la autoridad judicial competente por si existiese algún tipo de responsabilidad penal.