Un minero jubilado distribuyó 720 millones en Linares

Santiago Arráez Moreno, presidente de la peña del Real Betis de Linares y ex minero a quien la silicosis jubiló anticipadamente, ha repartido en su peña 720 millones de pesetas, que han correspondido a gran número de vecinos barrio de los Arrayanes, uno de los más pobres de Linares. Otra localidad, Vilches, situada a escasos kilómetros de esta última, famosa por su ganado porcino, ha cogido un pellizco de 480 millones. La capital, Jaén, tuvo que conformarse con una serie del cuarto premio, de 25 millones.

En total, la administración número 1 de Linares, situada en el centro de la ciudad...

Santiago Arráez Moreno, presidente de la peña del Real Betis de Linares y ex minero a quien la silicosis jubiló anticipadamente, ha repartido en su peña 720 millones de pesetas, que han correspondido a gran número de vecinos barrio de los Arrayanes, uno de los más pobres de Linares. Otra localidad, Vilches, situada a escasos kilómetros de esta última, famosa por su ganado porcino, ha cogido un pellizco de 480 millones. La capital, Jaén, tuvo que conformarse con una serie del cuarto premio, de 25 millones.

En total, la administración número 1 de Linares, situada en el centro de la ciudad y que regenta Catalina Vendrell, ha vendido 20 series del tercer premio, lo que representa una cantidad de 1.200 millones de pesetas.

Santiago Arráez, que a sus 47 años representa una edad de 60 sin duda por el duro trabajo de la mina, era ayer en su peña del Betis un hombre doblemente feliz. Por un lado, él mismo ha conseguido 9, 600.000 pesetas; por otro, ha repartido más de 700 millones en el barrio de los Arrayanes, que, con 6.000 habitantes, tiene un 50% de la población activa en paro.

Participaciones de 100 pesetas

El ex minero compró en la administración citada 300 pesetas del tercer premio, 17.893, que luego dividió en participaciones de l00 y 500 pesetas.

A mediodía de ayer, Santiago, con una mueca de contenida felicidad en sus labios, era abrazado entre lágrimas por panaderos, lecheros, camareros, parados, pensionistas, madres de familia y, sobre todo, por niños, que reflejaban en sus miradas la ilusión de que los reyes magos puedan traerles un juguete mejor que en años anteriores.

Como anécdota, hay que reseñar que hasta el verano pasado la peña del Betis llevaba el nombre de José Fuentes, el torero de la tierra. Sin embargo, los socios decidieron que la peña no merecía ese nombre, tras un feo que el torero les hizo durante la pasada feria taurina de agosto. Santiago Arráez comenta que José Fuentes prácticamente no concedió importancia al hecho de que un grupo de aficionados pusiera su nombre a la peña, lo que provocó la indignación de los aficionados. Ahora, con la felicidad que dan los millones, la mayor parte de los vecinos de los Arrayanes a quienes ha sonreído la fortuna no piensa en comprarse grandes pisos o lujosos coches. Sólo quieren pagar las trampillas contraídas con los comerciantes, y, eso sí, gastar una pequeña cantidad en turrones, mantecados y algún que otro champaña para pasar la Nochebuena con la familia.

La propietaria de la administración que ha vendido las 20 series en Linares, Catalina Vendrell, se mostraba feliz y desilusionada a la vez: a pesar de repartir 1.200 millones de pesetas no se ha quedado con un solo décimo del número agraciado. "Pero no me importa", manifestó, "puesto que mi misión es vender lotería y, si es posible, dar algún gordo, como este año. Tengo confianza en que la suerte vuelva a sonreír a Linares en el próximo sorteo del Niño".

Mientras la lotera pronunciaba estas palabras, un hombre de mediana edad, con exquisita moderación en sus palabras, preguntaba por Catalina Vendrell. Era uno de los más de 20 representantes de las entidades bancarias que se lanzaron nada más conocerse el premio en busca de los nuevos ricos.