Ambigua relación entre Prensa y poder

La relación entre Prensa y poder político es al mismo tiempo compleja y ambigua, según se puso de manifiesto en el simposio. Por un lado, los diarios hacen de la vida política el objeto preferente de gran parte de su contenido y encuentran su clientela privilegiada en las personas que por razones profesionales o por vocación se interesan por la política. Y en ese sentido, como reconoció Eugenio Scalfari, director de La Repubblica, existe como una complicidad entre Prensa y poder. Pero, por otro, como arguyó Juan Luis Cebrián, la Prensa actúa con frecuencia como un contrapoder, siempre m...

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La relación entre Prensa y poder político es al mismo tiempo compleja y ambigua, según se puso de manifiesto en el simposio. Por un lado, los diarios hacen de la vida política el objeto preferente de gran parte de su contenido y encuentran su clientela privilegiada en las personas que por razones profesionales o por vocación se interesan por la política. Y en ese sentido, como reconoció Eugenio Scalfari, director de La Repubblica, existe como una complicidad entre Prensa y poder. Pero, por otro, como arguyó Juan Luis Cebrián, la Prensa actúa con frecuencia como un contrapoder, siempre mal visto por el poder, y en ocasiones hasta .con capacidad subversiva respecto del orden social dominante.Para Giovanni Spadolini, antiguo director de Il Corriere della Sera (otro de los diarios estudiados) actual secretario general del Partido Republicano y ministro de Defensa, la relación entre Prensa y política es una relación competitiva y complementaria, ya que ambas contribuyen a la constitución del discurso público. Discurso que para Enrique Tierno sólo puede recuperar su credibilidad si se instala en las coordenadas de la ética.

Según el alcalde de Madrid, la degradación actual del político y de la política se debe a la distancia que existe entre los ideales y los programas por una parte y la realidad del poder por otra, que obliga al político a degradarse frente a sí mismo y frente a los demás, convirtiendo la política en espectáculo.

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