Los mafiosos de la droga se instalan en España

El número de colombianos detenidos en España por tráfico de estupefacientes en el segundo trimestre de este año ascendió a 49 personas, cerca de la mitad del total de arrestados de esta nacionalidad que en todo el año anterior (104). Asimismo, la cocaína intervenida en nuestro país en lo que va de año duplica la cantidad decomisada por la policía durante en todo el año pasado.

, Fuentes vinculadas a la lucha contra la droga aseguran que el aumento durante este año en las cifras de detenidos colombianos y de cocaína intervenida, junto a las recientes detenciones en Madrid de dos importan...

El número de colombianos detenidos en España por tráfico de estupefacientes en el segundo trimestre de este año ascendió a 49 personas, cerca de la mitad del total de arrestados de esta nacionalidad que en todo el año anterior (104). Asimismo, la cocaína intervenida en nuestro país en lo que va de año duplica la cantidad decomisada por la policía durante en todo el año pasado.

, Fuentes vinculadas a la lucha contra la droga aseguran que el aumento durante este año en las cifras de detenidos colombianos y de cocaína intervenida, junto a las recientes detenciones en Madrid de dos importantes maflosos de esa nacionalidad dedicados al tráfico de la droga citada, revela de manera "evidente" que un gran número de traficantes se está esta bleciendo en nuestro país, no sólo como refugio y blanqueo de dinero sucio sino como centro de opera ciones y de negocios. El número de colombianos que entraron en España también el pasado año fue de 31.375 personas, cifra que supera con mucho la de cualquier otro grupo de suramericanos que visitan nuestro país.

El cerco permanente que desde hace años vienen estableciendo las policías de numerosos países del mundo, especialmente la de Estados Unidos, a los traficantes internacionales de cocaína y heroína ha provocado que muchos de los grandes maflosos de los países productores de estas sustancias estupefacientes hayan huido de sus lugares de origen. Fuentes que dirigen la lucha antidroga en España han asegurado que estas fugas han provocado que las maflas italiana y suramericana, especialmente la colombiana, estén instalándose en nuestro país, no sólo como lugar de blanqueo de dinero sino como centro de residencia, operaciones y tráfico de estupefacientes. España se ha convertido, según estas fuentes, en uno de los más importantes países consumidores de cocaína y heroína, junto con Italia, Francia y Holanda.

La detención en Madrid del capo de la Mafia siciliana, Gaetano Badalamenti, extradido recientemente a Estados Unidos, país que lo buscaba por considerarlo uno de los más importantes traficantes de heroína del mundo, ya puso de manifiesto que España era un lugar "seguro" para los grandes traficantes. El juez de Sicilia Giovanni Falcone manifestó a este periódico que resultaba "evidente" que la presencia y las inversiones de este capo en España hacían que pensar que no sólo se trataba de un lugar de refugio para el mafioso.

Asimismo, la reciente detención en Madrid de dos importantes mafiosos colombianos reclamados por la justicia norteamericana como importantes traficantes intemacionales de cocaína hace suponer a la policía española de estupefacientes que esta mafia está instalándose en España, donde el aumento del consumo de cocaína ha sido "vertiginoso" en los últimos años. En 1983 fueron intervenidos en España 57 kilogramos de cocaína y en los tres primeros trimestres de este año se han decomisado cerca 100 kilogramos de esta sustancia. Este aumento, según los expertos, indica que está incrementándose notablemente la introducción de coca en España.

Asimismo, sus inversiones en España y el dinero intervenido en diferentes cuentas bancarias, que suman más de 100 millones de pesetas sólo seis meses después de llegar a Madrid, así como otras informaciones confidenciales, hace suponer a los expertos en la lucha contra el tráfico de drogas que estos dos mafiosos colombianos no pensaban únicamente blanquear su dinero aquí, sino instalarse definitivaménte en nuestro país.

"El poderío económico de los dos mafiosos colombianos", asegura una fuente policial, "es impresionante y sus relaciones. con círculos políticos y financieros llegan a muy altas capas". Uno de los dos maflosos colombianos, Gilberto Rodríguez Orejuela, de 45 años de edad, es accionista mayoritario de una importante cadena nacional de radio en Colombia (el Grupo Radical Colombiano) y posee numerosos negocios legales en ese país, donde, según informaciones solventes, poseía vinculaciones importantes con las esferas políticas y financieras.