Tensiones al máximo nivel en UGT por la política sindical

Nicolás Redondo, secretario general de la Unión General de Trabajadores (UGT), ha mantenido en los últimos tiempos fuertes enfrentamientos con el número dos de la organización, José Luis Corcuera, como consecuencia de las posturas sostenidas por este último en defensa de la política económica del Gobierno.El detonante de las tensiones existentes en el seno de la organización ha sido el Acuerdo Económico y Social (AES), que UGT esperaba que sirviera para corregir los aspectos más duros de la política económica y social del Gobierno. En la reunión de la comisión ejecutiva en la que por pr...

Nicolás Redondo, secretario general de la Unión General de Trabajadores (UGT), ha mantenido en los últimos tiempos fuertes enfrentamientos con el número dos de la organización, José Luis Corcuera, como consecuencia de las posturas sostenidas por este último en defensa de la política económica del Gobierno.El detonante de las tensiones existentes en el seno de la organización ha sido el Acuerdo Económico y Social (AES), que UGT esperaba que sirviera para corregir los aspectos más duros de la política económica y social del Gobierno. En la reunión de la comisión ejecutiva en la que por primera vez se analizó el AES se produjo un fuerte rechazo al contenido del acuerdo, apoyado por Nicolás Redondo. Corcuera inantuvo que había que firmarlo tal como estaba. En el siguiente comité confederal, en el que se estudió la ratificación del pacto, se aprobó con el beneplácito de Redondo una resolución que quita a los negociadores de UGT en el desarrollo del AES la facultad de aprobar cualquier decisión si no contaba con la autorización del comité confederal. Nuevamente, Corcuera se opuso a esta resolución.

Fuentes del sindicato han asegurado que estas y otras divergencias responden al deseo del secretario general de UGT de evitar la instrumentalización del sindicato por parte de algunos sectores del Gobierno. José Luis Corcuera, por el contrario, no admite la existen cia de presiones del Gobierno y mantiene que la política debe ser la practicada en la actualidad.

José Luis Corcuera negó ayer la existencia de tensiones extraordinarias, mientras que Miguel Ángel Ordóñez, secretario de inflormación de UGT, advirtió que hoy se pronunciaría oficialmente la organización, aunque anticipó que no existía ninguna presión por parte del Gobierno y que esta información respondía a intereses concretos de personas muy determinadas del sindicato. No hubo posibilidad de conseguir declaraciones de Nicolás Redondo, que, según Ordóñez, estaba de viaje.

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