Escasa asistencia de oficiales en activo a la presentación del libro de Pitarch

Un centenar de personas, entre ellas algunos militares, asistieron en la noche del miercoles a la presentación del libro El honor y el honor militar, escrito por el capitán de Caballería José Luis Pitarch. Hace tres mese Pitarch solicitó la baja voluntaria en el Ejército después de que fuera procesado y arrestado en varias ocasiones por la justicia militar y no lograra el ascenso a comandante, extremo que rara vez ha ocurrido a un militar en los últimos años.

Pitarch estuvo acompañado en el acto de presentación por Pedro Laín Entralgo, director de la Real Academia Española; Pedro J...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Un centenar de personas, entre ellas algunos militares, asistieron en la noche del miercoles a la presentación del libro El honor y el honor militar, escrito por el capitán de Caballería José Luis Pitarch. Hace tres mese Pitarch solicitó la baja voluntaria en el Ejército después de que fuera procesado y arrestado en varias ocasiones por la justicia militar y no lograra el ascenso a comandante, extremo que rara vez ha ocurrido a un militar en los últimos años.

Pitarch estuvo acompañado en el acto de presentación por Pedro Laín Entralgo, director de la Real Academia Española; Pedro J. Ramírez, director de Diario 16, y el coronel Álvaro Graiño, que también abandonó el Ejército tras ser condenado a uri mes de prisión por un escrito publicado en un periódico de Madrid en 1981.

Laín Entralgo calificó a Pitarch de "paladín de la desmitificación del honor", y dijo de él que, además de militar, "es un hombre que lee, piensa y siente". Pedro J. Ramírez señaló por su parte: "Concibo al Ejército como a la Renfe, la Dirección General de Carreteras o la Federación Española de Fútbol, es decir, como una institución frente a la que no se puede generar amor u odio".

El coronel Graíño dijo que nadie puede sentirse superior por ser militar. "Intelectuales, médicos, obreros, campesinos o militares, somos iguales". Para Graiño, el golpismo es algo impropio del siglo XX. "No tiene nada que ver con el honor utilizar las armas que un pueblo pone a disposición de un Ejército contra el propio pueblo".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Sobre la firma

Archivado En