El arbitraje de Iberia, de obligado cumplimiento, puso fin ayer a la huelga

Juan Ignacio Moltó, nombrado en el pasado Consejo de Ministros árbitro en el conflicto de Iberia, dictó ayer un laudo de obligado cumplimiento en el que se recogen, en esencia, las posiciones que ha venido defendiendo la compañía aérea durante los 36 días de huelga. Desde el momento de hacerse público el contenido del dictamen, la huelga carece de validez. Los representantes de los pilotos señalaron ayer que acatarían la decisión del árbitro, aunque acusan a éste de parcialidad, subrayando que presentarán recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional.

El arbitraje recoge un incremen...

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Juan Ignacio Moltó, nombrado en el pasado Consejo de Ministros árbitro en el conflicto de Iberia, dictó ayer un laudo de obligado cumplimiento en el que se recogen, en esencia, las posiciones que ha venido defendiendo la compañía aérea durante los 36 días de huelga. Desde el momento de hacerse público el contenido del dictamen, la huelga carece de validez. Los representantes de los pilotos señalaron ayer que acatarían la decisión del árbitro, aunque acusan a éste de parcialidad, subrayando que presentarán recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional.

El arbitraje recoge un incremento salarial del 3,5% e importantes recortes en los derechos económicos de los pilotos. Las condiciones salariales serán objeto de nueva negociación el día 1 de enero de 1985. Sin embargo, el dictamen no entra en el tema de los despidos y los deja en manos de la jurisdicción correspondiente, obligando, no obstante, a la dirección de Iberia a readmitir a los comandantes expulsados de la compañía en el caso de que la autoridad laboral considere que los despidos son improcedentes.Los pilotos habían exigido al árbitro que el laudo recogiera la obligación de Iberia de proceder a la anulación de los despidos y sanciones que se habían producido en el período de huelga.

Al mismo tiempo, el laudo recomienda a la empresa que congele los expedientes disciplinarios abiertos en el transcurso de los paros. El expediente de regulación de empleo y de modificación de las condiciones de trabajo del colectivo de pilotos presentado por Iberia ante el Ministerio de Trabajo habrá de ser retirado por entender que era una medida a la que la empresa recurrió ante la imposibilidad de negociar.

La compañía Iberia, según el laudo dictado ayer, se compromete a mantener su actual plantilla. Las vacantes que se produzcan habrán de ser cubiertas con el personal aprobado y pendiente de ingreso. Es decir, los 34 pilotos a que se hace referencia en el convenio de 1983. De acuerdo con lo expresado por Juan Ignacio Moltó, los pilotos no podrán convocar nuevos paros por motivos contemplados en el dictamen mientras dure la vigencia del mismo, establecida en dos años.

Páginas 40 y 41

Editorial en la página 8

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