Los pilotos no levantarán la huelga si el arbitraje no obliga a Iberia a anular las sanciones y los despidos

El Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (SEPLA) no levantará la huelga si el arbitraje obligatorio impuesto por el Gobierno no recoge la retirada de sanciones a los pilotos. Estas condiciones fueron comunicadas ayer a Juan Ignacio Moltó, director general del Instituto de Mediación, Arbitraje y Conciliación (IMAC), nombrado árbitro en el conflicto que enfrenta a la dirección y a los pilotos de Iberia desde hace 31 días. Moltó se entrevistará en la mañana de hoy con representantes de la compañía para escuchar sus alegaciones antes de dictar laudo.

Fuentes del SEPLA señalaron ayer...

El Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (SEPLA) no levantará la huelga si el arbitraje obligatorio impuesto por el Gobierno no recoge la retirada de sanciones a los pilotos. Estas condiciones fueron comunicadas ayer a Juan Ignacio Moltó, director general del Instituto de Mediación, Arbitraje y Conciliación (IMAC), nombrado árbitro en el conflicto que enfrenta a la dirección y a los pilotos de Iberia desde hace 31 días. Moltó se entrevistará en la mañana de hoy con representantes de la compañía para escuchar sus alegaciones antes de dictar laudo.

Fuentes del SEPLA señalaron ayer que, aun en el caso de que se dicte el laudo de obligado cumplimiento, si en el mismo no se recoge el levantamiento de las sanciones y la anulación de los 10 despidos que se han producido hasta ahora en el transcurso del conflicto, la organización de pilotos mantendrá la huelga. Esta decisión fue comunicada ayer por la tarde a Juan Ignacio Moltó por una representación del SEPLA, en la entrevista que mantuvieron entre las partes, dentro del proceso de arbitraje.Los motivos de la huelga, en un principio circunscritos al incumplimiento del pasado convenio y la apertura de las negociaciones del de 1984, fueron ampliados a la retirada de sanciones y despidos en nueva comunicación al Ministerio de Trabajo hace unos días. Las citadas fuentes de la organización de pilotos subrayaron que "ni aún en el caso de que se propusiera que los despidos siguieran los trámites legales -conciliación y Magistratura de Trabajo- se aceptaría la desconvocatoria de huelga. El laudo debe recoger la obligación de Iberia de levantar las sanciones producidas en el desarrollo de las acciones de protesta".

Expulsados

Hasta el momento son 10 los comandantes expulsados de la compañía por presuntas irregularidades graves cometidas en el desarrollo de su actividad. Los tres primeros, por faltas graves en sus respectivos vuelos uno de ellos, por no presentarse a realizar una línea incluida en los servicios mínimos- Los dos siguientes, presuntamente por tratar de impedir el derecho a realizar su trabajo a un segundo, el único de todo el colectivo que no sigue la huelga de pilotos.En los cinco casos de despidos más recientes, estas acciones consisten en ralentizar al máximo las operaciones de rodadura, aterrizaje y despegue o cumplir escrupulosamente el reglamento de la compañía, dando lugar a grandes retrasos en los servicios. Además de los 10 despedidos, Iberia tiene abiertos expedientes a más de medio centenar de pilotos, así como a todo el comité de huelga.

La aplicación del denominado plan Charly -huelga de celo encubierta y paralela a la huelga legal- continúa causando graves irregularidades en los vuelos. Según señalaba ayer el diario La Verdad, un comandante de Iberia tuvo que ser protegido por la fuerza pública para evitar que fuera agredido por los pasajeros del vuelo Madrid-Alicante.

Dos horas sobre Alicante

Según el citado diario, el comandante sobrevoló Alicante a baja altura durante dos horas antes de tomar tierra. Los pasajeros pensaron en un principio que se trataba de alguna avería grave, pero al darse cuenta de que la actitud del piloto respondía a la huelga de celo, comenzaron a insultar al comandante. Éste pidió a la torre de control que le pusieran protección policial en el aeropuerto.

Una vez que el aparato tomó tierra, el piloto permaneció largo rato sin abrir las salidas y tuvo que abandonar el avión por un lugar distinto al habitual, ante el temor de ser agredido. Los pasajeros acudieron posteriormente a facturación, donde más tarde se presentó también el comandante, que hubo de ser protegido por la fuerza pública.

Ayer, a causa de la huelga, fueron cancelados 60 vuelos. De ellos, 58 nacionales -incluidos 16 del puente áereo entre Madrid y Barcelona- y 12 internacionales.

Por su parte, la Federación Internacional de Pilotos de Líneas Aéreas (Ifalpa) se reunió días pasados en Toronto (Canadá), donde, según el comunicado oficial de esta organización, se trató "la imposición unilateral de inaceptables regímenes de trabajo y otras condiciones a los pilotos de Iberia por parte de su dirección, respaldada por el Gobierno". Las conclusiones de la reunión serán dadas a conocer en una conferencia de prensa que tendrá lugar en Londres.

Reacciones

La decisión de nombrar un árbitro en el conflicto de Iberia ha provocado diversas reacciones en organizaciones políticas y sindicales. CC OO difundió ayer un comunicado en el que señala el acierto de la decisión, aunque advierte que puede haber llegado tarde. Y el Partido Demócrata Popular (PDP), por su parte, felicita "tanto al Gobierno como a la oposición" por la postura adoptada, a la vez que advierte de la necesidad de que el árbitro mantenga una posición "flexible y equitativa".

Manuel Fraga, presidente de Alianza Popular acusó ayer de estupidez y villanía" a los que afirman que la huelga de pilotos está siendo utilizada por la derecha. Fraga añadió que "lo que no se puede aceptar es que partidos que sostienen sindicatos ideológicos como la UGT, o el PCE con CC OO, se atrevan a a decir eso de partidos que todo el mundo sabe que tiene las manos fuera del mundo sindical".