Juicio contra El PAÍS por no publicar una carta de rectificación

Ayer se celebró en el Juzgado de Primera Instancia número 6 de Madrid el juicio verbal promovido por Pedro Tena, director general de Administración Civil, a raíz de la negativa del director de EL PAÍS a publicar una carta de rectificación a dos informaciones y un editorial que hacían referencia a que desde Aviación Civil se habían facilitado datos que perjudicaban a la compañía Iberia. Éste es uno de los primeros casos en que una persona acude a los tribunales para intentar difundir una carta acogiéndose a la ley 2/1984, reguladora del derecho de rectificación.Este periódico publicó los dí...

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Ayer se celebró en el Juzgado de Primera Instancia número 6 de Madrid el juicio verbal promovido por Pedro Tena, director general de Administración Civil, a raíz de la negativa del director de EL PAÍS a publicar una carta de rectificación a dos informaciones y un editorial que hacían referencia a que desde Aviación Civil se habían facilitado datos que perjudicaban a la compañía Iberia. Éste es uno de los primeros casos en que una persona acude a los tribunales para intentar difundir una carta acogiéndose a la ley 2/1984, reguladora del derecho de rectificación.Este periódico publicó los días 9 y 18 de junio dos informaciones, tituladas Funcionarios españoles filtraron los errores de Iberia denunciados en Estados Unidos y Aviación Civil proporcionó a un periodista de EE UU información que perjudicaba a la compañía Iberia. El día 18 fue difundido un editorial cuyo título era Iberia, caída en picado. Tena envió sendas cartas de rectificación, que el director de El PAÍS, Juan Luis Cebrián, decidió no publicar, por entender que sus contenidos no desvirtuaban los hechos contenidos en la información publicada y desbordaban por completo la apelación a la ley, ya que las cartas incurrían en opiniones, juicios de valor y apreciaciones subjetivas.

Al juicio, celebrado ayer, Tena acudió acompañado de su abogado, Benito Castejón, aunque expresó su deseo de autodefenderse. A preguntas del juez, se ratificó en la demanda, a la que se opusieron los representantes legales de EL PAÍS por entender que la rectificación no desvirtuaba los extremos de la información publicada.

Pedro Tena explicó que una carta de un técnico aeronáutico británico, llamado White, en la que se ponían de relieve varios errores cometidos por aviones de Iberia en el Atlántico norte, fue publicada por EL PAÍS en una traducción inexacta del original inglés. Negó que la citada carta la hubiera facilitado él a varios periodistas, en contra de lo publicado.

Como testigos declararon los periodistas Joaquina Prades y Carlos Yárnoz, ambos redactores de EL PAÍS. La primera aseguró que la carta de White la había obtenido de la Administración cuando escribía sobre el último accidente ocurrido en Barajas, pero se acogió al secreto profesional cuando se le preguntó si la había facilitado el director general de Aviación Civil. Dijo que periodistas de otros medios también habían obtenido la carta a través de la misma persona, y agregó que quien le dio la carta quería demostrar con ella la escasa profesionalidad de los pilotos españoles.

Yárnoz, autor de las informaciones, afirmó que Aviación Civil, según Tena, había abierto un expediente a la dirección de Iberia por no formar suficientemente a los pilotos. A preguntas de Tena, añadió que era cierto que en una conversación telefónica éste le había dicho que los errores en el Atlántico norte cometidos por pilotos de Iberia no podían atribuirse a su poca habilidad, sino a que una de las aeronaves de dicha compañía estaba equipada por un complejo sistema de navegación PMS, pero que también le dijo que había que elegir el piloto adecuado para el avión adecuado. El juicio quedó visto para sentencia.

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