Irán e Irak bombardean objetivos civiles mientras Teherán advierte a Riad contra futuros ataques a sus aviones

Irán e Irak continuaron ayer los bombardeos artilleros y navales contra objetivos civiles de uno u otro país iniciados el martes con el mortífero ataque iraquí a la ciudad kurda iraní de Baneh. Teherán ha amenazado a Arabia Saudí con una severa respuesta si su aviación ataca otra vez a los aviones iraníes y ha pedido a Riad que evite "todo acto que ponga en peligro al golfo Pérsico". El miércoles por la noche chocó con una mina, en aguas del Golfo, un carguero liberiano.

Radio Teherán informó que 272 civiles habían resultado muertos o heridos en el bombardeo iraquí a la ciudad de Nahava...

Irán e Irak continuaron ayer los bombardeos artilleros y navales contra objetivos civiles de uno u otro país iniciados el martes con el mortífero ataque iraquí a la ciudad kurda iraní de Baneh. Teherán ha amenazado a Arabia Saudí con una severa respuesta si su aviación ataca otra vez a los aviones iraníes y ha pedido a Riad que evite "todo acto que ponga en peligro al golfo Pérsico". El miércoles por la noche chocó con una mina, en aguas del Golfo, un carguero liberiano.

Radio Teherán informó que 272 civiles habían resultado muertos o heridos en el bombardeo iraquí a la ciudad de Nahavand, situada a 260 kilómetros de la frontera en la provincia occidental de Hamadán, señala Reuter. La emisora también dio cuenta de bombardeos sobre Dezful y Masjed Soleiman, en la provincia de Juzestán, en el suroeste del país, pero no dio detalles de bajas. Estos ataques se produjeron a última hora del miércoles. Ayer la misma emisora anunció que por la mañana habían sido bombardeadas Delhoran y Guilan-Garb.Los bombardeos de las tres primeras localidades fueron confirmados por Irak, según Efe. Un portavoz militar de Bagdad manifestó que las fuerzas iraquíes atacaron "zonas escogidas" de las tres ciudades en represalia por el bombardeo a que la artillería pesada iraní sometió la misma noche al puerto de Basora y a otras tres localidades fronterizas iraquíes. El ataque artillero iraní contra Basora, que causó 21 muertos y 116 heridos, fue "un crimen que no podía quedar impune".

Como respuesta a los ataques matutinos cuatro aviones iraníes bombardearon por la tarde las ciudades iraquíes de Kifri y Saadiyeh, situadas a un centenar de kilómetros al noreste de Bagdad.

La Cruz Roja Internacional ha pedido desde Ginebra a ambos contendientes que pongan "rápidamente fin a los bombardeos de civiles sin defensa" desencadenados por la "mortífera incursión" del martes de la aviación iraquí sobre la ciudad iraní de Baneh, donde, según Teherán, hubo que registrar 325 muertos muertos y 300 heridos.

Protesta iraní

El anuncio de la advertencia de Teherán a Riad se hizo ayer en la capital iraní y es la primera reacción del régimen de Jomeini al combate aéreo del martes, durante el cual los F-15 saudíes abatieron al menos un Phantom F-4 iraní gracias a la ayuda técnica de Estados Unidos.Fuentes del Pentágono informaron que habían sido dos los aparatos derribados, pero en Teherán se limitan a señalar que el avión encargado de proteger al abatido recibió "un aviso de la flota norteamericana", sin dar más detalles.

"La República Islámica de Irán advierte que si se repite una acción de estas características y si los aviones iraníes -cuya única misión es asegurar la estabilidad de la región- son atacados de nuevo se responderá severamente", según la nota de protesta oficial entregada el miércoles por el Ministerio iraní de Exteriores al encargado de negocios saudí en Teherán. Irán sostiene que su Phantom fue derribado "sobre aguas internacionales" del Golfo.

La nota de protesta de Teherán especifica que Irán "espera que el reino de Arabia Saudí evite en el futuro llevar a cabo cualquier acto que ponga en peligro al golfo Pérsico"

La circulación de buques de terceros países en el Golfo sufrió ayer un nuevo contratiempo al saberse que la noche anterior el carguero de bandera liberiana Tassaki había chocado con una mina. El buque, que había descargado trigo en el puerto iraní de Bandar Abbas, se dirigía hacia Arabia Saudí cuando, a unas 100 millas al este de Qatar, chocó con una mina. La explosión provocó un incendio a bordo que se consiguió dominar.