Roca hace responsable de la querella al presidente del Gobierno

"Se ha demostrado que con los socialistas lo peligroso es ganar", manifestó Miquel Roca ayer tarde en el Congreso al ser preguntado por la querella en trámite contra el presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol, por el asunto de Banca Catalana. "Es un eufemismo", dijo, "que se haya debido a impulsos del Banco de España. Ha, sido interpuesta por orden del Gobierno y el responsable es el presidente, que asume las decisiones de todos los órganos que jerárquicamente dependen de él".Miquel Roca considera que "por vez primera durante la democracia a petición del Gobierno se produce un en...

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"Se ha demostrado que con los socialistas lo peligroso es ganar", manifestó Miquel Roca ayer tarde en el Congreso al ser preguntado por la querella en trámite contra el presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol, por el asunto de Banca Catalana. "Es un eufemismo", dijo, "que se haya debido a impulsos del Banco de España. Ha, sido interpuesta por orden del Gobierno y el responsable es el presidente, que asume las decisiones de todos los órganos que jerárquicamente dependen de él".Miquel Roca considera que "por vez primera durante la democracia a petición del Gobierno se produce un enfrentamiento entre instituciones. Al presidente le consta que el presidente de la Generalitat no tiene nada que ver con el tema de Banca Catalana y tiene, por tanto, una especial responsabilidad al saber que se va contra la verdad de los hechos".

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El portavoz de la Minoría Catalana reiteró que la Fiscalía General del Estado, que conoce su dependencia del Gobierno, no se atreve a plantear la querella sin contar con el debido consentimiento. Roca explicó que en los informes del Banco de España no existen indicios de responsabilidades por parte de Jordi Pujol.

Para Roca "existe un manifiesto deseo por parte del Gobierno de desacreditar el proceso autonómico español. Pieza fundamental era Cataluña, y lo que no pudieron ganar en las urnas, intentarán lograrlo por otros medios". "Antes de las elecciones", añadió, "jamás se intentó involucrar a Pujol. Ahora sí, cuando el resultado electoral pone en entredicho a los socialistas. Felipe González y Alfonso Guerra quedaron muy comprometidos en la campaña electoral".

El Gobierno central ha reaccionado con frialdad a la anticipación de que se interpondría una querella contra antiguos directivos de Banca Catalana. En círculos cercanos al equipo económico del Gobierno se aseguraba ayer que "si ha habido algún prurito político en el caso de Banca Catalana ha sido el de dar un tratamiento de máxima delicadeza al asunto".

Sobre el momento en que se produce la actuación acusatoria, estos medios recordaron que hasta entrado 1984 no se pudo culminar el informe del Banco de España, base sobre la. que después se elaboró el proyecto de querella por la fiscalía. El primer secretario del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), Raimon Obiols, manifestó ayer que "esta cuestión debe despolitizarse".

Por su parte, Pedro Bofill, portavoz de la comisión ejecutiva federal del PSOE manifestó, en respuesta a las declaraciones de Roca en las que responsabiliza a Felipe González de la querella que, "al parecer, algunos reformistas pretenden que se mantengan los comportamientos franquistas en el funcionamiento de las instituciones".

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