Los claveles marchitos de Portugal

Ni siquiera bajo el gobierno de los herederos de la revolución reina la unidad a la hora de que los portugueses celebren el décimo aniversario de la desaparición de la dictadura. La mayor parte de los principales protagonistas que constituyeron la fuerza motriz del golpe de 1974 se han distanciado de las celebraciones organizadas por el Gobierno de Soares. ( ... )Soares no aprecia ya a los oficiales de la actual asociación Veinticinco de Abril como compañeros de unión de hace 10 años, sino que les ve como factores perturbadores e incluso como agentes comunistas infiltrados en las fuerzas armad...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Ni siquiera bajo el gobierno de los herederos de la revolución reina la unidad a la hora de que los portugueses celebren el décimo aniversario de la desaparición de la dictadura. La mayor parte de los principales protagonistas que constituyeron la fuerza motriz del golpe de 1974 se han distanciado de las celebraciones organizadas por el Gobierno de Soares. ( ... )Soares no aprecia ya a los oficiales de la actual asociación Veinticinco de Abril como compañeros de unión de hace 10 años, sino que les ve como factores perturbadores e incluso como agentes comunistas infiltrados en las fuerzas armadas. Estos oficiales de izquierdas sienten que el Gobierno socialista ha traicionado el espíritu de la revolución de los claveles, que encontró su símbolo en una flor roja en un ojal o en un fusil. ( ... )

Para la mayoría del pueblo la pregunta sobre la conveniencia del golpe es ociosa, pese a la grave crisis económica por la que atraviesa el país ( ... ): el cambio fue saludado como una liberación del atraso político y social. Nadie responsabiliza al golpe de las dificultades actuales, pese a que los experimentos socialistas generen nuevos próblemas. Fundamentalmente, se aceptó la vuelta de los -derechos democráticos como compensatorios de todos los inconvenientes. Pese a todo, la democracia portuguesa, con sus numerosos cambios de Gobierno, no se ha estabilizado definitivamente: señal de ello es la protesta de los oficiales.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En