La red de asistencia psiquiátrica sólo tiene en Madrid nueve camas por 100.000 habitantes

Un estudio realizado por la Consejería de Sanidad y Bienestar Social de la Comunidad de Madrid sobre los recursos asistenciales del sector público existentes en materia de salud mental en la región, revela una situación de patente escasez, como se refleja en el número de nueve camas por cada 100.000 habitantes para enfermos agudos o en el hecho de que todo el dispositivo del Instituto Nacional de la Salud, base del sistema sanitario español, dedique únicamente 11,55 horas de consulta en neurología y psiquiatría al año por cada 1.000 habitantes (1,9 minutos al día por cada 1.000 habitantes)....

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Un estudio realizado por la Consejería de Sanidad y Bienestar Social de la Comunidad de Madrid sobre los recursos asistenciales del sector público existentes en materia de salud mental en la región, revela una situación de patente escasez, como se refleja en el número de nueve camas por cada 100.000 habitantes para enfermos agudos o en el hecho de que todo el dispositivo del Instituto Nacional de la Salud, base del sistema sanitario español, dedique únicamente 11,55 horas de consulta en neurología y psiquiatría al año por cada 1.000 habitantes (1,9 minutos al día por cada 1.000 habitantes).

El estudio ratifica la "insuficiencia del sistema actual para satisfacer las necesidades de la población" en el área de la red pública sanitaria, y cuantifica y describe dichos recursos en relación con la demanda.El sector público sanitario cuenta en la región de Madrid con un total de 3.084 camas de hospitalización psiquiátrica para adultos, que representan una proporción de 0,65 camas por cada 1.000 habitantes, estimación que considera insuficiente el trabajo de la Consejería de Sanidad y Bienestar Social, que ha sido dirigido por el Instituto de Salud Mental de Madrid.

La cifra de camas debería, en realidad, rebajarse, según el estudio, a 0,37 camas por cada 1.000 habitantes, al considerar que 1.340 camas están inmovilizadas -tienen más carácter de asilo que de asistencia sanitaria propiamente dicha-, ya que se hallan ocupadas por deficientes mentales (842 camas) o por ancianos (498 camas) que no padecen una patología psiquiátrica.

En este conjunto, para cubrir las necesidades de hospitalización de los enfermos agudos, que exigen breves espacios de tiempo, se cuenta con tres unidades en hospitales generales y dos en psiquiátricos, dentro del área metropolitana, y con un número insuficiente de camas efectivas: nueve por cada 10.0.000 habitantes.

Alto nivel de crónicos

Paralelamente, existe un total de 1.327 camas para enfermos de larga estancia o residenciales, que representa un índice de 28 camas por 100.000 habitantes, las cuales permanecen inmovilizadas permanentemente por una población que lleva años en esta situación (más de un 80% lleva más de cinco años. de estancia media). Gran parte de los establecimientos sanitarios con disponibilidades de este tipo se encuentra fuera de la región de Madrid, y las camas están concertadas desde antiguo con, centros dependientes de instituciones religiosas. La situación en este apartado lleva a que gran parte de estas hospitalizaciones se haga en el sector privado o no se haga, por lo que existe un gran número de pacientes crónicos integrados en la comunidad.El dispositivo asistencial del Instituto Nacional de la Salud, que el estudio denomina como "base de nuestro sistema sanitario", cuenta en Madrid con 3.467.031 usuarios-beneficiarios. Se apunta asimismo como de especial interés el hecho de que el Insalud dedica a consultas de neurología y psiquiatría 11,55 horas al año por cada 1.000 habitantes, lo que, planteado de otro modo en el estudio, supone impartir tratamiento a un paciente y medio por cada 1.000 habitantes.

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Se resaltan, además, otros aspectos negativos: los servicios de psiquiatría infantil y para adolescentes están sin desarrollar, los servicios específicos para drogadictos (alcohólicos incluidos) o psicogeriátricos son insuficientes, y la comunicación y coordinación entre los diversos servicios es muy reducida. Asimismo, destaca el estudio que se produce un mal aprovechamiento del personal como consecuencia de una total ausencia de planificación y, además, la insuficiencia general del sistema obliga a la población a buscar ayuda para sus problemas psicológicos y psiquiátricos en la medicina privada.

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