Precio, causas y consecuencuencias de la coompra

La compra por el Banco de Vizcaya de la mayoría de Banca Catalana (lo que supone las del BIC, BIM y Barcelona) tiene un coste prefijado desde junio pasado: 13.606 millones de pesetas. Es la misma cantidad que el consorcio o pool de 15 bancos privados que en pública subasta adquirió Catalana el 17 de mayo de 1983, se comprometió a pagar al Fondo de Garantía de Depósitos. La subasta se realizó después de que el Gobierno renunciase a ejercer el tanteo a que tenía derecho. Con la compra, el Vizcaya asume todos los avales de los créditos oficiales, de los que hasta ahora respondían todos los...

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La compra por el Banco de Vizcaya de la mayoría de Banca Catalana (lo que supone las del BIC, BIM y Barcelona) tiene un coste prefijado desde junio pasado: 13.606 millones de pesetas. Es la misma cantidad que el consorcio o pool de 15 bancos privados que en pública subasta adquirió Catalana el 17 de mayo de 1983, se comprometió a pagar al Fondo de Garantía de Depósitos. La subasta se realizó después de que el Gobierno renunciase a ejercer el tanteo a que tenía derecho. Con la compra, el Vizcaya asume todos los avales de los créditos oficiales, de los que hasta ahora respondían todos los socios del pool.La ejecución de la opción de compra se formalizará en los próximos días, 15 meses antes del plazo de que el Vizcaya -al que el consorcio bancario encomendó la gestión de Catalana- disponía para ello, que era de dos años. Tras el buen ejercicio de 1983, la operación estaba cantada. Las razones de que haya decidido ejercitar ahora dicha opción son cinco: el conocimiento de la entidad; la positiva trayectoria de 1983 (6.239 millones de cash flow); las perspectivas de futuro y dos causas "del entorno".

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Una de ellas es la oportunidad de hacerlo con antelación al proceso electoral en Cataluña: comprar después significaba seguir dejando planear durante varios meses un "interrogante ante la clientela sobre el futuro de la casa". La otra, el espaldarazo obtenido en la plácida junta general del pasado día 11 de febrero, que tanto contrastó con otras tempestuosas juntas anteriores. Según el presidente, Antoni Negre, el día 11 hubo "un auténtico plebiscito de los accionistas" y del entorno en general.

Tras la operación, habrá cambio de consejo. Y queda una incógnita: qué sucederá con el paquete del 7% que mantiene La Caixa desde 1979. El secretario del Fondo de Garantía manifestó el 14 de junio pasado que sería dicho Fondo el que resolvería esta cuestión. La caja ha venido reclamando 3.000 millones por la pactada recompra de su paquete. También se anima una carrera: el grupo Vizcaya se sitúa mejor en el ranking de los grandes. Mientras, los técnicos del Bilbao calculan con la vista puesta en el Atlántico.

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