Cartas al director

Entre altos tribunales

Considerando el indiscutible prestigio de su periódico como órgano de opinión, me preocupan el enfoque y algunos conceptos contenidos en su editorial Conflicto entre tribunales, sobre la decisión de la sala segunda del Tribunal Supremo de citar a los magistrados del Tribunal Constitucional para que declaren sobre la información que anticipó EL PAIS en torno a la sentencia que resolvió el recurso de inconstitucionalidad por la expropiación de Rumasa.El fondo de la cuestión -o sea, el origen de la información utilizada por su periódico, que suscitó acusaciones sobre una supuesta ...

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Considerando el indiscutible prestigio de su periódico como órgano de opinión, me preocupan el enfoque y algunos conceptos contenidos en su editorial Conflicto entre tribunales, sobre la decisión de la sala segunda del Tribunal Supremo de citar a los magistrados del Tribunal Constitucional para que declaren sobre la información que anticipó EL PAIS en torno a la sentencia que resolvió el recurso de inconstitucionalidad por la expropiación de Rumasa.El fondo de la cuestión -o sea, el origen de la información utilizada por su periódico, que suscitó acusaciones sobre una supuesta filtración- queda zanjado desde el segundo párrafo del editorial, mencionando el artículo 20 de la Constitución "que contiene como mandato vinculante la garantía del secreto profesional' en el ejercicio de la libertad de prensa; y más de esto, ni podemos ni queremos, ni vamos a decir". Entendido.

Pero entiendo menos, en el último párrafo, la inquietante sugerencia de que los magistrados del Tribunal Supremo, la mayoría de cuyos miembros, reclutados por oposición, aplicó sin excesivos conflictos niorales las duras normas penales del franquismo", pudieran estar empeñados en un forcejeo, por móviles políticos y corporativistas, contra los miembros del Tribunal Constitucional. En primer lugar, me parece tan injustificada la fácil, referencia al "franquismo" para descalificar la actuación de tan alto órgano de la Administración de justicia como me parecía inaceptable, durante la época mencionada, la alusión a la conspiración judeo-masónica como explicación de todos los males. En segundo lugar, me parece Pasa a la página 12 Viene de la página 11 peligroso plantear una antítesis entre el Tribunal Constitucional, como órgano democráticamente elegido, y el Tribunal Supremo, como órgano no representativo. Quizá los miembros de la sala segunda de este alto organismo querrían que, también en relación a ellos, se considerase, como recoge él primer párrafo del artículo de información general, en primera página de EL PAIS, sobre el mismo asunto: "El riesgo que puede significar para la democracia someter a los miembros de una de sus instituciones básicas a la duda sobre su honorabilidad". /

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