Reportaje:Viajes

La vuelta a los paraísos exóticos

Londres se convierte en los primeros meses del año en un gran filón de oportunidades para el viajero

Recorrer a pie el camino hasta el campamento base del Everest, alquilar una villa de ensueño en Barbados o alojarse en el hotel favorito de Rudyard Kipling en Singapur son posibilidades al alcance de muchas más personas de lo que generalmente se cree. No hace falta ser millonario. Sólo tener algo de dinero, saber a dónde dirigirse para encontrar la información deseada y dónde comprar el billete más barato. Probablemente ninguna ciudad mejor para ello en Europa que Londres.

Por más disparatado y dificil que le parezca a alguien el viaje de sus sueños, lo más fácil es que ya se le haya oc...

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Recorrer a pie el camino hasta el campamento base del Everest, alquilar una villa de ensueño en Barbados o alojarse en el hotel favorito de Rudyard Kipling en Singapur son posibilidades al alcance de muchas más personas de lo que generalmente se cree. No hace falta ser millonario. Sólo tener algo de dinero, saber a dónde dirigirse para encontrar la información deseada y dónde comprar el billete más barato. Probablemente ninguna ciudad mejor para ello en Europa que Londres.

Por más disparatado y dificil que le parezca a alguien el viaje de sus sueños, lo más fácil es que ya se le haya ocurrido a una agencia de viajes inglesa.Recorrer el Everest se ha convertido ya, por ejemplo, en una oferta clásica de Londres. Un gurka (soldado nepalés del Ejército británico) llamado Mike Cheney tuvo la ocurrencia de crear la Sherpa Cooperative Trekking, con oficina central en el Reino Unido. La cooperativa Sherpa organiza dos tipos de viajes, de 31 y 24 días, dependiendo de si la expedición sale desde Katmandú o desde Lukla, más cerca del pico más alto del mundo. El precio es caro -oscila entre las 250.000 y las 300.000 pesetas-, pero incluye absolutamente todo: trayectos de avión, ¡da y vuelta a Londres, alojamiento en tiendas o en alberges de la zona (el camino está bastante poblado), comida, equipo y lo más importante, los guías y portadores que se encargarán de aligerar al viajero de la pesada carga que exige la expedición. Las jornadas a pie han sido estudiadas para que no resulten agotadoras y para que no sea necesario reunir condiciones fisicas excepcionales. Conviene recordar, sin embargo, que el campamento base está a menos de 11.000 pies de la cumbre; es decir, a 17.800 pies sobre el nivel del mar. Las jornadas se inician al clarear -los viajeros encuentran ya preparado su desayuno- y acaban sobre las seis de la tarde, con una cena abundante.

Menos arriesgado, más barato y casi tan exótico resulta alquilar una villa de superlujo en Barbados. La compañía nos ofrece en alquiler la Bears House, en la costa oeste de la isla. Cuesta unas 100.000 pesetas a la semana, pero tiene capacidad para ocho persona, así que, con viaje incluido (pueden conseguirse billetes de ¡da y vuelta desde Londres por poco más de 350 libras), las vacaciones no superarán las 125.000 p,esetas por cabeza. Uno de los atractivos de la villa, además de su espectacular piscina, rodeada de terrazas y pabellones, es que incluye el servicio: jardinero, cocinero, lavandera, doncella y mayordomo. Ofertas similares, hay en Santa Lucía, Bahamas y Jamaica.

Una semana en Singapur

Tampoco resulta disparatado de precio pasar una semana en uno de los hoteles más hermosos del mundo: el Reffles Hotel, en Singapur. Calculándolo con tiempo, s,e pueden conseguir billetes, ida y vuelta, tarifa APEX, por cerca de 85.000 pesetas. Cada noche en el hotel favorito de Kipling, Joseph Conrad y Somerset Maugham cuesta 11.000 pesetas. El Raffles, escribe Gavin Young, quizá no es el mejor hotel de Asia, pero merece el título de iino de los más evocadores e inolvidables. La leyenda dice que Conrad leyó, sentado en la baranda del hotel, la historia que dio origen a su novela Lord Jim. Lamentablemente, los admiradores del escritor tendrán que darse prísa: la compañía dueña del hotel amenaza con construir detrás del edificio original otro con 500 camas más.

Los safaris fotográficos también han dejado de ser un privilegio para millonarios. Transglobal (Londres 01-7308941) ofrece 18 días recorriendo Kenia por el equivalente a 85.000 pesetas. Elprecio incluye prácticamente todo, salvo el billete hasta Nairobi, que, ¡da y vuelta desde Londrbs, puede costar unas 70.000 pesetas (Mapte Travel, 016310742).

En la capital keniata, el viajero se alojará en un hotel, pero después recorrerá el país durmiendo en tiendas de campaña. El montaje del campamento y las comidas corren a cargo de los guías. El turista sólo tiene que llevar su propio saco de dormir.

En autobús a Katmandú

o a Escandinavia

Para los poco aficionados al camping -aunque sea de lujo- y algo escasos de dinero, los ingleses han inventado el tcp deck, un autobús de dos pisos, con cocina, camas y sanitario, que es capaz de llegar hasta Katmandú. El viaje exige siete semanas y cuesta unas 80.000 pesetas (sin billete de vuelta a Londres). Las comidas no están incluidas, pero está prevista la creación de un fondo común de 2.500 pesetas a la semana. Así que por menos de 100.000 pesetas se puede llegar a Nepal habiendo recorrido sin prisas por el camino Francia, Italia, Yugoslavia, Grecia, Turquía, Irán, Pakistán y la India.

El mismo sistema sirve también para visitar la carísima Escandinavia (tres semanas por 77.000 pesetas, comida incluida), o Escandinavia y la Unión Soviética (cuatro semanas por 100.000 pesetas, también con fondo para la comida incluido), o para hacer un tour por Estados Unidos (cinco semanas, por unas 100.000 pesetas, sin contar billetes de avión). Dar la vuelta completa a Norteamérica (10 semanas) cuesta unas 180.000 pesetas. Normalmente se viaja en top deck. Sea por Europa o Estados Unidos, sirve para practicar el inglés (lengua oficial de la expedición), hacer nuevos amigos (el autobús tiene capacidad para 72 personas) y ejercitar dotes culinarias (por riguroso turno, los viajeros cocinan la comida para todo el grupo). Otra agencia, Treck (Londres 01-3735085), ofrece viajes similares, en pequeflas furgonetas, por precios parecidos. Desde el pasado mes de septiembre, Londres (Hann Overland, 01-7696656) ofrece un viaje por tren espectacular: el Moghul Express, que le llevará desde la estación Victoria hasta Nueva Delhi. El viaje, en grupos de 20 personas, dura aproximadamente 45 días y cuesta 122.000 pesetas, pero no incluye comidas ni alejamieto en hoteles, aunque muchos días se duerme en literas del ferrocarril, que sí figuran dentro del precio general. Los organizadores estiman que con menos de 1.500 pesetas al día se puede cubrir todo el recorrido.

La misma agencia ofrece un tour en avión (Londres-Bombay-Katmandú-Delhi-Londres) por unas 140.000 pesetas, y un recorrido de 22 días por Siria, Jordania e Irak por casi la misma cifra, aviones y comida incluidos; un número parecido de días en la península de Yukon y Alaska -recorrido aconsejado para menores de 35 años- cuesta aproximadamente unas 200.000 pesetas, con billetes de avión, ¡da y vuelta a Londres, y comida incluidos.

Para quienes prefieren organizar sus propios viajes, Londres es también el lugar ideal de partida. El Reino Unido es el país de Europa en el que aterriza un mayor número de compañías aéreas de todo el mundo. Calculando el viaje con tiempo y recorriendo con cuidado las ofertas de compañías prácticamente desconocidas en España es posible encontrar billetes de ¡da y vuelta a los puntos más distantes de la Tierra por precios razonables: Nueva York, en la People Express, cuesta 44.000 pesetas; -El Cairo, prácticamente lo mismo; Bangkok, 67.000; Kuala Lumpur, 10.000 pesetas más; Moscú no llega a las 33.000, y Caracas, a las 90.000 pesetas. Además, en algunos casos, y pagando una diferencia pequeña, es posible realizar numerosas escalas.

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