Tribuna:

El mercado, como reino de taifas

Los escarceos a que se han visto sometidos los mercados de valores en la primera semana del año han venido de la mano de la inversión a corto plazo. La materialización de beneficios ha sido una de las características de este corto ciclo, y en cierto modo ha estado provoca da por las excesivas alegrías que vivieron las bolsas los últimos días del pasado año y el primero de éste. Excepto en el mercado catalán, en el que los vendedores se han mostrado más apremiantes, los índices generales reflejaban al final de la semana sustanciosos beneficios (3,41en Valencia, 2,95 en Bilbao y 2,29 ...

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Los escarceos a que se han visto sometidos los mercados de valores en la primera semana del año han venido de la mano de la inversión a corto plazo. La materialización de beneficios ha sido una de las características de este corto ciclo, y en cierto modo ha estado provoca da por las excesivas alegrías que vivieron las bolsas los últimos días del pasado año y el primero de éste. Excepto en el mercado catalán, en el que los vendedores se han mostrado más apremiantes, los índices generales reflejaban al final de la semana sustanciosos beneficios (3,41en Valencia, 2,95 en Bilbao y 2,29 en Madrid), que han sido producto de la inercia de aquella primera sesión. En las otras dos, los mercados se mostraron mucho menos dispuestos a apostar por el futuro inmediato, y cada cual arrimó el ascua a su sardina.

Con un mercado convertido en una especie de reino de taifas no es de extrañar que fuese el sector bancario el que se hiciese con el control, a pesar de que su evolución no haya sido nada brillante; pero había al menos una clara intención de aprovechar las ocasiones que se presentaran para ganar posiciones. En el grupo de los siete grandes bancos (Central, Banesto, Hispano, Bilbao, Vizcaya, Santander y Popular) hubo mejoras de hasta 16 enteros, y aunque el resto se quedó lejos de esta cifra, también mejoró, exceptuando al Bilbao, que descontó su dividendo del día 31.

La Compañía Telefónica fue también protagonista destacada, al sufrir en la primera jornada una pérdida, de cuatro enteros, que después recuperaría. Aparente mente, las causas estuvieron en la no aceptación de la propuesta de actualización de tarifas presenta da por la compañía y del plan cuatrienal de inversiones. í Gran parte de la atención de los seguidores de las bolsas estaba centrada en los valores eléctricos. Una vez descontados los dividen dos, y, con la incógnita de los porcentajes, que se repartirán para los próximos, se esperaba para estos títulos un precio por debajo del 40%.

Sin embargo, en la mayoría de los casas han logrado mantenerse por encima de esta cifra, aparentemente sin problemas. Los planteamientos sobre estos valores habrán de ser estudiados nuevamente, y por el momento parece que las primeras versiones les son favorables. De los demás grupos destaca, por el interés que despertó hace- unas semanas, el de alimentación, en el que El Águila inició una recuperación después de su vertiginosa caída. Esta vez no hay ningún tipo de rumores que acompañe a esta nueva subida, pero el. rescoldo de las maravillosas operaciones que se esperaron en un tiempo no se ha apagado del todo y todavía hay quien cree que pueden ser posibles. De momento, los títulos de una empresa que está produciendo beneficios se han situado a la par, algo muy natural.

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