La ejecutiva de UGT de Alava no acepta su expuIsion y seguirá su mandato utilizando las siglas de la central socialista

La comisión ejecutiva provincial de UGT de Alava no aceptará la propuesta de fallo de expulsión dictada por la comisión de conflictos de la central socialista y permanecerá al frente de la unión provincial, según manifestó ayer Arturo Val del Olmo, secretario general de UGT de Álava, expulsado del seno de la organización.

La comisión ejecutiva pedirá a las bases del sindicato el apoyo a esta postura y llevará a los tribunales el derecho a seguir utilizando las siglas y la estructura de UGT.La decisión de la comisión ejecutiva provincial de permanecer al frente de la federación de Álava ...

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La comisión ejecutiva provincial de UGT de Alava no aceptará la propuesta de fallo de expulsión dictada por la comisión de conflictos de la central socialista y permanecerá al frente de la unión provincial, según manifestó ayer Arturo Val del Olmo, secretario general de UGT de Álava, expulsado del seno de la organización.

La comisión ejecutiva pedirá a las bases del sindicato el apoyo a esta postura y llevará a los tribunales el derecho a seguir utilizando las siglas y la estructura de UGT.La decisión de la comisión ejecutiva provincial de permanecer al frente de la federación de Álava puede desembocar en una escisión de la central. Arturo Val del Olmo manifestó ayer que la decisión tenía carácter político y se inscribía en la intención de disolver la UGT de Álava propiciada por determinados sectores del Partido Socialista de Euskadi (PSE-PISOE). Val del Olmo aseguró que si encontraban el necesario rechazo en las bases, no abandonarían la organización llevando a los tribunales el derecho a seguir utilizando las siglas de la central socialista y los edificios y bienes del sindicato.

Los conflictos entre la federación de Álava y el aparato de UGT viene de antiguo. De tendencia trotskista, esta federación ha venido protagonizando posturas fuertemente críticas respecto a la política asumida por el sindicato. De hecho, en la propuesta de fallo de expulsión a Arturo Val del Olmo -el resto de la comisión ejecutiva está incluido en otro expediente- se hace referencia a las posturas de indisciplina del secretario general de Álava.

El momento más virulento de la crisis entre la federación y el aparato de la UGT, se produjo durante el pasado mes de mayo, cuando un grupo de personas afiliadas a UGT y al PSOE intentaron asaltar la sede de la federación.

Los asaltantes, según denuncia presentada ante la autoridad judicial, iban acompañados de jóvenes en paro que habían reconocido haber percibido 2.000 pesetas por su actuación.

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