¿Beguin dimite?

( ... ) Beguin se retira de la escena política. Es un acontecimiento capital para todo Oriente Próximo; tanto la obstinación como la personalidad y el sentido mesiánico del que dirigía el Gobierno israelí desde 1977 han pesado muy seriamente sobre toda la región. ( ... ).Pocas capitales han comentado la decisión de Beguin de retirarse. La mayoría esperan un comunicado oficial. Desde el domingo, en Washington, no parecían disgustados con la perspectiva de la retirada de Beguin. El primer ministro israelí se había convertido en el curso de: los años en un aliado cada vez más dificil para Estados...

( ... ) Beguin se retira de la escena política. Es un acontecimiento capital para todo Oriente Próximo; tanto la obstinación como la personalidad y el sentido mesiánico del que dirigía el Gobierno israelí desde 1977 han pesado muy seriamente sobre toda la región. ( ... ).Pocas capitales han comentado la decisión de Beguin de retirarse. La mayoría esperan un comunicado oficial. Desde el domingo, en Washington, no parecían disgustados con la perspectiva de la retirada de Beguin. El primer ministro israelí se había convertido en el curso de: los años en un aliado cada vez más dificil para Estados Unidos y su intransigencia sobre el problema palestino ha constituido una grave preocupación primero para Carter y luego para Reagan, cuyo plan de paz había sido mal recibido por Jerusalén.

La multiplicación de las colonias de población judía en los territorios ocupados le había testado poco a poco la simpatía de la Administración republicana y también de la comunidad judía americana, desgarrada entre la fidelidad a Israel y su liberalismo. La guerra de Líbano había terminado por deteriorar la imagen de este hombre de hierro, al que, Washington se había complacido en reconocer como un aliado intangible, violentamente anticomunista. (... ) Polémicas violentas y dolorosas, agravadas por las matanzas de Sabra y de Chatila, se habían producido en el seno de la comunidad judía. ( ... ) La retirada de Beguin permitiría, sin duda, a Estados Unidos reiniciar sus, esfuerzos con un poco más de convicción. El Gobierno de Washington no espera que su eventual sucesor modifique significativamente la política israelí. Pero, al menos, se espera que no se encerrará en la intransigencia y el dogmatismo de su predecesor. (...)