Porta, contra las cuerdas

Pablo Porta se sintió más que satisfecho cuando conoció la sentencia del Tribunal de Cuentas sobre la auditoría de 1978. No celebró el hecho, pero sus adláteres sintieron ganas de hacerlo. Porta fue prudente, seguramente, porque sabía que el tema no estaba concluso. Al fiscal le denegaron el primer recurso. Fue la segunda batalla ganada por Porta. El fiscal no archivó el tema y su apelación ha sido atendida.La sala de Apelación del Tribunal de Cuentas ha apoyado el nuevo recurso del fiscal: "Ha lugar", ha dicho, "al recurso de queja formulado por el Ministerio Fiscal contra la inadmisión del d...

Pablo Porta se sintió más que satisfecho cuando conoció la sentencia del Tribunal de Cuentas sobre la auditoría de 1978. No celebró el hecho, pero sus adláteres sintieron ganas de hacerlo. Porta fue prudente, seguramente, porque sabía que el tema no estaba concluso. Al fiscal le denegaron el primer recurso. Fue la segunda batalla ganada por Porta. El fiscal no archivó el tema y su apelación ha sido atendida.La sala de Apelación del Tribunal de Cuentas ha apoyado el nuevo recurso del fiscal: "Ha lugar", ha dicho, "al recurso de queja formulado por el Ministerio Fiscal contra la inadmisión del de apelación interpuesto en impugnación de la sentencia dictada en juicio de cuentas, seguido a la Real Federación Española de Fútból el 13 de mayo del año en curso. Se admite, en ambos efectos, el mencionado recurso. Hágase saber al órgano jurisdiccional de primera instancia a fin de que previo emplazamiento de las partes, por término de 10 días, se remitan a esta sala los autos originales".

A Pablo Porta le han obligado a corregir el discurso, sin duda grandilocuente, que tenía preparado para la asamblea del próximo día 14. Porta ya no podrá decir que el Tribunal de Cuentas le dio la razón. Porta presume de salir bien de las cuerdas. Veremos como lo hace ahora.