Un pacto entre AP y el PNV no será aceptado por los electores, según el comité aliancista
La posibilidad de un pacto después de las elecciones entre la coalición de derechas en el País Vasco (AP-PDP-UL) y el PNV, evocada por distintos medios, se enfrentaría, caso de producirse, con el sentir del electorado de derechas, según constatación del comité de coordinación de la coalición, reunido en Bilbao para analizar la marcha de la campaña electoral.
La nota difundida ayer por dicho comité mantiene, de todas formas, cierta ambigüedad. El órgano coordinador "constata" el sentir de la base contrario al pacto con el nacionalismo y "toma conciencia" de esta forma de pensar y "del re...
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La posibilidad de un pacto después de las elecciones entre la coalición de derechas en el País Vasco (AP-PDP-UL) y el PNV, evocada por distintos medios, se enfrentaría, caso de producirse, con el sentir del electorado de derechas, según constatación del comité de coordinación de la coalición, reunido en Bilbao para analizar la marcha de la campaña electoral.
La nota difundida ayer por dicho comité mantiene, de todas formas, cierta ambigüedad. El órgano coordinador "constata" el sentir de la base contrario al pacto con el nacionalismo y "toma conciencia" de esta forma de pensar y "del respeto que la misma exige de nuestros cargos electos". Pero, a la vez, "pone en evidencia ante los electores que el objetivo de las elecciones municipales es resolver la tarea de gobernación y administración de las corporaciones y la solución de los problemas concretos de la vida local".La posibilidad de un pacto con el PNV fue evocada recientemente por algunos medios próximos a la coalición y denunciada por el socialista Txiki Benegas en unas declaraciones difundidas el pasado martes. Benegas se refirió al eventual pacto que habrían sellado a comienzos de marzo Xabier Arzallus, por una parte, y Miguel Herrero de Miñón, por otra, con motivo de la crisis institucional ocasionada por la retirada de toda la oposición del Pleno del. Parlamento vasco.
Benegas insinuó el martes que ese posible pacto podría prolongarse en acuerdos para que el PNV y la coalición se apoyen, tras el 8 de Mayo, a la hora de la elección de los alcaldes. El secretario general de los socialistas vascos aprovechó la ocasión para solicitar públicamente el voto de los electores de derecha argumentando que la verdadera confrontación se planteaba, el 8 de mayo, entre nacionalistas y no nacionalistas.
En una primera reacción, el dirigente del PDP, Julen Gimón, acusó a Benegas de "fluctuante y oportunista" y advirtió que, en su opinión, "pactar con Benegas es como pactar con el PSOE y el PNV al mismo tiempo". Posteriormente la coalición difundió una declaración en la que consideraba que "tan alejados están los socialistas y los nacionalistas de nuestros principios que no vemos la posibilidad de un pacto con ninguna fuerza"; pero, a renglón seguido, la declaración establecía las condiciones para una eventual negociación.
El nuevo pronunciamiento del órgano coordinador de la coalición recoge, por una parte, la reacción de la base a las anteriores declaraciones, pero da la imprensión de no querer cerrar definitivamente la necesidad de acuerdos puntuales posteriores.