La polémica con Madrid sobre las transferencias divide al Gobierno de Cantabria

El Gobierno de Cantabria no mantiene una postura uniforme en las críticas a la Administración central por el retraso de las transferencias de competencias, denunciada en una reciente declaración del Ejecutivo regional. Ésta ha sido en parte desmentida por el consejero de Hacienda y Economía, Serafín Fernández Escalante para el que las dificultades no provienen del Gobierno socialista, sino de sectores de funcionarios de algunos ministerios.La supuesta paralización de las transferencias ha sido desmentida también, por un portavoz del Ministerio de Administración Territorial, que ha señalado que...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El Gobierno de Cantabria no mantiene una postura uniforme en las críticas a la Administración central por el retraso de las transferencias de competencias, denunciada en una reciente declaración del Ejecutivo regional. Ésta ha sido en parte desmentida por el consejero de Hacienda y Economía, Serafín Fernández Escalante para el que las dificultades no provienen del Gobierno socialista, sino de sectores de funcionarios de algunos ministerios.La supuesta paralización de las transferencias ha sido desmentida también, por un portavoz del Ministerio de Administración Territorial, que ha señalado que desde el mes de febrero se han realizado más de 30 reuniones con los representantes cántabros, y está previsto terminar los contactos, en el próximo mes de abril.

Para el secretario general socialista y candidato a la presidencia del Gobierno regional, Jaime Blanco, las manifestaciones del Gobierno cántabro "no merecen mayor comentario, porque no responden a la realidad". Según el dirigente del PSOE se trata de una actitud electoralista, determinada por la comparecencia en las próximas elecciones regionales, en las listas de la coalición AP-PDP-UL, del actual presidente regional, José Antonio Rodríguez.

El consejero Fernández Escalante, responsable de la política de transferencias, precisó a EL PAÍS que no existen "diferencias cualitativas importantes entre la actuación de la Administración socialista y la centrista", ya que, en su opinión, la lentitud en el proceso de transferencias no se debe a motivaciones políticas, "sino a cuestiones burocráticas, a las reticencias de un cierto sector del alto funcionariado a comprender el proceso autonómico".

No obstante, para el consejero adjunto a la presidencia, José Ramón Saiz Fernández, existe una "invasión" de competencias de la Administración central, a través de sus direcciones periféricas.

Querella contra un ex consejero

La situación se ha complicado con la presentación ante el juzgado de Santander, por parte del Gobierno regional, de una denuncia contra el ex consejero de Trabajo y Sanidad y actual candidato a la alcaldía de Santander por el PSOE, Santiago Pérez Obregón, por supuesta sustracción o desaparición de alrededor de doscientos cincuenta expedientes de la citada consejería. Los documentos habrían sido retirados el 8 de marzo, un día después de que éste consejero fuera destituido.Pérez Obregón, por su parte, calificó ayer la citada denuncia de "infamia", acusando al consejero Saiz Fernández de prácticas electoralistas "indignas". En los próximos días presentará también una querella criminal por injurias contra el presidente del Gobierno cántabro y su consejero adjunto. El cesado consejero de Trabajo ha reiterado que tan sólo retiró documentos de su propiedad.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En