Un capitán de la Guardia Civil, separado del cuerpo por la confesión del 'ultra' arrepentido

El capitán de la Guardia Civil Andrés Bachiller Alcolea presuntamente implicado en la confesión del ultra arrepentido ha sido separado provisionalmente del cuerpo. La información fue facilitada el pasado jueves por Rafael Vera, director general de la Seguridad del Estado, en el transcurso de una entrevista mantenida con los diputados socialistas Joan Marcet y Rudolf Guerra.El pasado 9 de marzo, Manuel Reinero Banda, el ultra arrepentido, aseguró en su confesión que el responsable del Ejercito Español de Liberación (EEL) era un teniente de la Guardia Civil, destacado en aquella ép...

El capitán de la Guardia Civil Andrés Bachiller Alcolea presuntamente implicado en la confesión del ultra arrepentido ha sido separado provisionalmente del cuerpo. La información fue facilitada el pasado jueves por Rafael Vera, director general de la Seguridad del Estado, en el transcurso de una entrevista mantenida con los diputados socialistas Joan Marcet y Rudolf Guerra.El pasado 9 de marzo, Manuel Reinero Banda, el ultra arrepentido, aseguró en su confesión que el responsable del Ejercito Español de Liberación (EEL) era un teniente de la Guardia Civil, destacado en aquella época en el cuartel de Ciutat Badia, en la comarca barcelonesa del Vallès. Aseguraba el ultra en su confesión que este oficial de la Benemérita tenía perfecto conocimiento de los atracos perpetrados por tres de los miembros del EEL, que conocía también las acciones terroristas dirigidas contra las sedes de los partidos políticos y los ayuntamientos de la comarca del Vallès y que incluso se había comprometido a facilitar armas al grupo de extrema derecha.

Las acusaciones de Manuel Reinero contra aquel teniente de la Guardia Civil, hoy capitán afincado en Madrid, fueron recibidas con cierto escepticismo en medios allegados a la abogacía. Los citados medios recordaron que ya en 1980, cuando fue desarticulado el Ejército Español de Liberación, Manuel Reinero hizo una detallada confesión implicando al oficial y asegurando que éste había facilitado algunas de las armas y proyectiles utilizados por los extremistas en las acciones.

Ahora, tres años después, y a raíz de las nuevas imputaciones vertidas por Manuel Reinero, la autoridad ha decidido separar provisionalmente del cuerpo al oficial, en espera de que el Juzgado número 4 de la Audiencia Nacional investigue el caso.