Odio de clases

Cada día, y a lo largo del proceso democrático -aún por consolidar-, se han hecho o se hacen declaraciones peligrosamente demagógicas, pero el señor Fraga Iribarne se lleva la palma. Intentar establecer el criterio de que la expropiación de Rumasa es fruto de odio de clases es una auténtica insensatez, y en su caso más.Es lo suficientemente inteligente y sabe muy bien salvo, que su intelecto sufra lagunas que está haciendo demagogia y utilizando un juego peligroso; legítimo es que quiera ascender al poder, al frente de su formación política, pero no lo es que intente hacerlo manipulando a la o...

Cada día, y a lo largo del proceso democrático -aún por consolidar-, se han hecho o se hacen declaraciones peligrosamente demagógicas, pero el señor Fraga Iribarne se lleva la palma. Intentar establecer el criterio de que la expropiación de Rumasa es fruto de odio de clases es una auténtica insensatez, y en su caso más.Es lo suficientemente inteligente y sabe muy bien salvo, que su intelecto sufra lagunas que está haciendo demagogia y utilizando un juego peligroso; legítimo es que quiera ascender al poder, al frente de su formación política, pero no lo es que intente hacerlo manipulando a la opinión pública y confundiendo, aún más, la situación.

Sus palabras, desde que subieron al poder los socialistas, tienen un claro corte -en muchos casos- dictatorial, y, si sigue utilizando este peligroso juego, se puede agravar más la situación, cosa que una mayoría de españoles no desea. Por ello, señor Fraga, deje de lanzar alaridos y razone sus respuestas políticas desde su posición política, pero sin, atentar y confundir a la opinión pública.

Si no es capaz de dar más luz a sus intervenciones, habrá que pensar que está usted en su ocaso político o que tiene muy malas intenciones. En todo caso, retírese y saldremos ganando todos. /