Tribuna:

Nuevas bajas, con órdenes de compra para las eléctricas

Las abultadas bajas en los valores eléctricos y en Telefónica fueron la causa principal de las pérdidas que registraron ayer los índices de las bolsas españolas, que reflejaban un fenómeno negativo bastante más amplio, aunque menos espectacular, que afectaba a la práctica totalidad de los valores negociados.Los vendedores aparecieron firmemente dispuestos a conseguir sus intentos realizadores desde primeras horas de la mañana, y fueron precisamente los precios de las acciones eléctricas quienes soportaron en mayor medida estas embestidas. Es cierto que tenían acumuladas unas importantes plusva...

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Las abultadas bajas en los valores eléctricos y en Telefónica fueron la causa principal de las pérdidas que registraron ayer los índices de las bolsas españolas, que reflejaban un fenómeno negativo bastante más amplio, aunque menos espectacular, que afectaba a la práctica totalidad de los valores negociados.Los vendedores aparecieron firmemente dispuestos a conseguir sus intentos realizadores desde primeras horas de la mañana, y fueron precisamente los precios de las acciones eléctricas quienes soportaron en mayor medida estas embestidas. Es cierto que tenían acumuladas unas importantes plusvalías generadas a lo largo de las reuniones de la pasada semana, que los especialistas no llegaban a justificar. Incluso es aceptable que los tipos de interés en el sistema están bajando a un ritmo bastante más lento del inicialmente previsto, y éste es el indicador que acostumbra a marcar, por competencia con las rentabilidades de los títulos de este sector, la evolución de los precios de estos títulos.

Sin embargo, las crisis de confianza que algunos especialistas parecen haber desatado en torno a las posibilidades de estos títulos quizá correspondan más a un arrebato que a una estrategia meditada. La prueba de ello es que, al cierre de las reuniones de ayer, la demanda volvía a tomar cuerpo sobre estas acciones y se solicitaban con alguna insistencia cantidades apreciables de valores concretos.

En lo que respecta al sector bancario, la apacible situación de días atrás dio un notable cambio, y Banesto -junto con el Santander- vio multiplicarse vertiginosamente sus saldos vendedores. Concretamente, en el mercado madrileño, la diferencia que existía entre las órdenes compradoras y las de venta para el primer banco del país ascendía a 130.337 acciones. En consecuencia, su cotización cedía tres enteros, a pesar de que durante la reunión se especuló con la posibilidad de que la entidad intentase aguantar la caída de sus precios para evitar un excesivo abaratamiento en el precio que pueda resultar en el canje de sus acciones, ya que actualmente se encuentra- en el período de fijación de precio medio previo a, la citada operación.

Por su parte, el Santander se vio sorprendido por un inesperado flujo de ventas que elevaba su resto vendedor a los 44.737 títulos, ante los que se replegaba cuatro enteros. Del resto de los grandes, únicamente el Hispano mejoraba cinco enteros, apoyado en una pequeña diferencia positiva de 9.618 acciones. Esta ruptura de la línea declinante del sector fue interpretada en diversos corros como un claro intento de mantener, e incluso mejorar, los precios de estas acciones ante la inminente integración del Urquijo.

Las restantes bolsas observaron unos comportamientos similares, con pérdidas en sus índices generales de cierta consideración, una manifiesta reducción en la actividad y un discreto renacer en las expectativas compradoras a última hora para algunos valores eléctricos.

Para las reuniones de hoy se espera la confirmación del volumen real de las órdenes de compra en el sector eléctrico, mientras que la confianza desciende sobre las posibilidades de establecer una línea de resistencia sólida a las bajas por parte de los valores bancarios.

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