Socialistas y comunistas rompen su colaboración en el Ayuntamiento de Avilés
El Partido Comunista de Asturias (PCA) reconoció ayer implícitamente la ruptura del pacto municipal de la izquierda en Avilés en un escrito en el que dirige graves acusaciones contra el grupo socialista, a propósito del convenio urbanístico del barrio de La Luz acordado entre el alcalde José Manuel Ponga y el primer teniente de alcalde José Martínez, ambos del PSOE y la sociedad Repasa.La dirección comunista avilesina califica el convenio de "tomadura de pelo inadmisible", de "metedura de pata" y de "migajas" las contrapartidas dadas al Ayuntamiento por Repasa, a las que considera "los restos ...
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El Partido Comunista de Asturias (PCA) reconoció ayer implícitamente la ruptura del pacto municipal de la izquierda en Avilés en un escrito en el que dirige graves acusaciones contra el grupo socialista, a propósito del convenio urbanístico del barrio de La Luz acordado entre el alcalde José Manuel Ponga y el primer teniente de alcalde José Martínez, ambos del PSOE y la sociedad Repasa.La dirección comunista avilesina califica el convenio de "tomadura de pelo inadmisible", de "metedura de pata" y de "migajas" las contrapartidas dadas al Ayuntamiento por Repasa, a las que considera "los restos del naufragio provocado por la ineptitud de quienes (se refiere a Ponga y Martínez), ante la proximidad de las elecciones, se han empeñado en guiar solos la nave municipal sin tener ni idea de la navegación".
El acuerdo entre el grupo socialista y Repasa se refiere a la calificación de una finca como suelo urbano. A cambio del reconocimiento de ciertos derechos edificatorios, la propiedad entregará unos terrenos al Ayuntamiento. El PCA argumenta contra la operación, que Repasa debería ceder al municipio 188.702 metros cuadrados, en vez de los 182.000 previstos en el convenio.
Por otra parte, la dirección comunista de Avilés critica al alcalde socialista por permitir a Repasa una edificabilidad de 7,3 metros cúbicos por metro cuadrado, índice que considera alarmantemente elevado, teniendo en cuenta que el plan de ordenación vigente sólo admite tres metros cúbicos por metro cuadrado.
José Martínez, manifestó ayer a este periódico que la reacción de los comunistas es simplemente una rabieta electoralista con la que pretenden demostrar que el PSOE es incapaz de gobernar sin ellos.