Cartas al director

¡Bien por el Ayuntamiento!

En este país es un hecho claro que somos más dados a censurar y lamentarnos de lo que marcha mal, probablemente se me dirá porque hay demasiadas cosas que funcionan deficientemente, que a resaltar los aspectos positivos, que también los hay, de nuestra comunidad.Es igualmente cierto que uno de los chivos expiatorios de nuestras críticas suelen ser los ayuntamientos. Por eso quiero hoy romper una lanza en favor del Ayuntamiento de Madrid por el siguiente hecho: el lunes, segundo día de Pascua -por tanto, día de fiesta y puente además-, a las siete de la tarde se cae uno de los postes de farolas...

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En este país es un hecho claro que somos más dados a censurar y lamentarnos de lo que marcha mal, probablemente se me dirá porque hay demasiadas cosas que funcionan deficientemente, que a resaltar los aspectos positivos, que también los hay, de nuestra comunidad.Es igualmente cierto que uno de los chivos expiatorios de nuestras críticas suelen ser los ayuntamientos. Por eso quiero hoy romper una lanza en favor del Ayuntamiento de Madrid por el siguiente hecho: el lunes, segundo día de Pascua -por tanto, día de fiesta y puente además-, a las siete de la tarde se cae uno de los postes de farolas del alumbrado público de una calle que, aun siendo secundaria, registra bastante tráfico. Se llama a la Policía Municipal, y a los diez minutos escasos aparece un moderno camión grúa del Ayuntamiento cuyos ocupantes, de forma rápida y precisa, reparan la avería.

El hecho es simple pero aleccionador y, definitivamente, a la altura de los grandes países a los que tanto nos gustaría parecernos. Un aplauso, pues, para el Ayuntamiento, y ¡adelante!/

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