Aburrimiento y demostración de buenas intenciones

La semana bursátil tuvo su colofón con unas reuniones enormemente aburridas, en las que las posiciones de equilibrio predominaron, hasta el punto de que en el mercado valenciano, y comejemplo evidente de lo que había ocurrido en el resto de las bolsas, siete valores mejoraban sus precios, siete perdían posiciones, y veintinueve se contentaban con repetir sus cotizaciones anteriores. Este claro ejemplo de indefinición del mercado valenciano resultaba perfectamente extensible al resto de las bolsas españolas.Ayer les tocó a los grandes elefantes del mercado superar sus cotizaciones anteri...

La semana bursátil tuvo su colofón con unas reuniones enormemente aburridas, en las que las posiciones de equilibrio predominaron, hasta el punto de que en el mercado valenciano, y comejemplo evidente de lo que había ocurrido en el resto de las bolsas, siete valores mejoraban sus precios, siete perdían posiciones, y veintinueve se contentaban con repetir sus cotizaciones anteriores. Este claro ejemplo de indefinición del mercado valenciano resultaba perfectamente extensible al resto de las bolsas españolas.Ayer les tocó a los grandes elefantes del mercado superar sus cotizaciones anteriores en la bolsa madrileña. Eléctricas y Telefónica experimentaron discretas subidas, que eran consecuencia directa de dos posturas encontradas: la moderación de los vendedores y el deseo de buena parte de los especialistas de no quedar descolocados ante un eventual cambio en la tendencia de los mercados de valores, que en las hipótesis mas optimistas se pueden producir en las sesiones intermedias de la próxima semana.

Por su parte, el grupo de bancos continuó ofreciendo una discreta mayoría de posturas vendedoras que se reflejaba en sus saldos al cierre. No obstante en algunos valores aislados de este grupo, Popular era el ejemplo más claro, se pod:ía observar como algunos inversores institucionales demandaban títulos después de cerrado el período convencional de contratación. La realidad es que sólo el Popular cubría el ciento por ciento de la oferta que se le generaba, y ello a costa de un esfuerzo mínimo. Posiblemente los recortes de las últimas reuniones hayan sido la causa que ha decidido a estos peculiares inversores a comenzar a tomar posiciones.

La sorpresa del día en la Bolsa de Madrid la constituyó el importante volumen de negocio que se desarrolló en torno a Explosivos. Aunque hasta esta mañana no se dispondrá de los datos oficiales de negociación, algunos operadores estirriaban que, sólo en el corro, se podían haber cruzado entre 300.0019 y 400.000 acciones. Algunos especialistas recordaban una fuerte operación de acciones de Explosivos realizada hace un par de meses con crédito al mercado. El vendedor por el momento permanece en la sombra, aunque en medios bursátiles se comentaba con cierto desparpajo la proximidad de alguno de los hombres del Urquijo en el parqué madrileño al corro en el que se contrataba este valor.

El anuncio de la fusión entre Unión Eléctrica y FENOSA ha sido realizado de forma prácticamente oficial. llace pocas semanas esta posibilidad fue categóricamente desmentida por los responsables de la política bursátil de este país, y por las propias sociedades, quienes atribuyeron la inquietud que el entonces rumor provocaba entre los accionistas de las respectivas compañías a los infundios inexactos de los que la Prensa acostumbra a hacerse eco. La realidad es que los últimos perjudicados, han resultado los de siempre: aquellos pequeños accionistas que por su escaso nivel de contacto directo con la realidad financiera normalmente se ven obligados a dar crédito a los comunicados oficiales. En definitiva, que nuevamente se ha estimulado a ese colectivo al que en todas las declaraciones oficiales se pretende recuperar como inversor activo, los pequeños ahorradores. Enhorabuena a quien corresponda este nuevo acierto, y gracias por reconocer que la Prensa, aunque no sea más que de vez en cuando, relata hechos ciertos.