TRIBUNALES

El forense Osorio Samaniego, condenado por falso testimonio

El médico forense Luis Osorio Samaniego ha sido condenado con 20.000 pesetas de multa o veinte días de arresto sustitutorio en caso de impagar por un delito de falso testimonio, según sentencia dictada por el titular del Juzgado de Instrucción número 1, de Barcelona. El citado juzgado ha considerado probado que existió un delito de falso testimonio en la elaboración por parte del ahora condenado de dos informes del estado psíquico de un recluso. Las conclusiones a las que llegaba el forense en los informes, realizados con sólo cuatro meses de diferencia, eran totalmente contradictorios. En el ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El médico forense Luis Osorio Samaniego ha sido condenado con 20.000 pesetas de multa o veinte días de arresto sustitutorio en caso de impagar por un delito de falso testimonio, según sentencia dictada por el titular del Juzgado de Instrucción número 1, de Barcelona. El citado juzgado ha considerado probado que existió un delito de falso testimonio en la elaboración por parte del ahora condenado de dos informes del estado psíquico de un recluso. Las conclusiones a las que llegaba el forense en los informes, realizados con sólo cuatro meses de diferencia, eran totalmente contradictorios. En el primer informe, de fecha 4 de febrero de 1980, se decía que el recluso Emilio Hidalgo Correa, delincuente habitual y heroinómano, "tenía normales sus funciones psíquicas fundamentales y su entendimiento y voluntad están dentro de una aparente normalidad".En el segundo informe, el 2 de julio del mismo año, el forense señalaba, por el contrario, que el recluso era "débil mental y, según las pruebas aplicadas, su coeficiente intelectual es de 0,50".

El pasado 3 de diciembre, Emilio Hidalgo fue juzgado por un delito de robo con lesiones. En la vista, ante lo contradictorio de los informes, el fiscal pidió que se pasara testimonio de los hechos al juzgado decano de instrucción. En la citada vista, el forense había declarado que el estado del recluso había variado en virtud de que en tres meses de estar en la cárcel podía contraerse una oligofrenia. Posteriormente, el Juzgado de Instrucción número 1, de Barcelona, procesó al forense.

La acusación particular, ejercida por la abogada del recluso Hidalgo Correa, había pedido para el forense una pena de reclusión menor.

Archivado En