La familia del doctor Iglesias espera un contacto definitivo

La familia del doctor Iglesias Puga se encuentra a la espera de un contacto definitivo con los secuestradores -que podría resolverse en las próximas horas- para proceder al pago del rescate que pidieron hace unos días por la liberación del padre del cantante Julio Iglesias y que asciende a la cantidad de dos millones de dólares (cerca de doscientos millones de pesetas).EL PAÍS, que conocía esta información desde la semana pasada, accedió a no publicarla durante algunos días a petición de altos cargos del Ministerio del Interior y para no poner en peligro la vida del secuestrado. Hasta el momen...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La familia del doctor Iglesias Puga se encuentra a la espera de un contacto definitivo con los secuestradores -que podría resolverse en las próximas horas- para proceder al pago del rescate que pidieron hace unos días por la liberación del padre del cantante Julio Iglesias y que asciende a la cantidad de dos millones de dólares (cerca de doscientos millones de pesetas).EL PAÍS, que conocía esta información desde la semana pasada, accedió a no publicarla durante algunos días a petición de altos cargos del Ministerio del Interior y para no poner en peligro la vida del secuestrado. Hasta el momento, los secuestradores se han puesto en contacto con la familia del doctor en tres ocasiones.

En un principio, los secuestradores exigieron la cantidad de diez millones de dólares, pero esta cifra se rebajó hasta la actual en negociaciones posteriores. La familia del doctor exige una prueba fehaciente de que la víctima se encuentra en perfecto estado, mientras las investigaciones de la policía continúan bajo el más estricto silencio.

Pasa a la página 13

La familia del doctor Iglesias ha comunicado en tres ocasiones, por teléfono, con los autores del secuestro

Viene de la primera página

Los secuestradores del doctor Iglesias, desaparecido el pasado día 29 de diciembre, se pusieron en contacto telefónico con el abogado de la familia el último día del pasado año, por primera vez. Posteriormente, éstos enviaron una carta para pedir las condiciones en que deberían proceder al pago del rescate, que fue recibida por el mismo contacto la víspera de la festividad de los Reyes, y, por último, los secuestradores llamaron de nuevo a Fernando Bernáldez el pasado viernes día 8.

Durante el fin de semana pasado, tanto los familiares como la Policía estuvieron a la espera de la definitiva llamada de los secuestradores, lo que podría haber resuelto el caso definitivamente. Tal llamada no se ha producido hasta ahora. Las dos comunicaciones telefónicasde los secuestradores fueron realizadas desde una cabina pública de la capital de España.

Los secuestradores del doctor exigieron en un principio la cantidad de diez millones de dólares -cerca de mil millones de pesetas-, aunque en negociaciones posteriores se consiguiá rebajar la cifra hasta los dos millones de dólares. Fuentes policiales solventes indicaron a este periódico que una de las condiciones impuestas por los secuestradores para proceder a la liberación del doctor Iglesias consistía en que se disolviera el amplio despliegue policial que fue montado en torno al caso y el tema se "enfriara" convenientemente, de tal forma que éstos tuvieran garantías de que la operación fuera un éxito.

Algunas informaciones publicadas en el día de ayer hacen referencia a que la cantidad exigida por los secuestradores se encuentra ya en la capital de España para proceder al pago del rescate, extremo este que no fue ni confirmado ni desmentido por la familia Iglesias. Según parece, un millón de dólares fue enviado el pasado jueves a través de un vuelo regular de la compañía Iberia, desde Miami a Madrid, en siete sacas, en billetes pequeños y usados, según las condiciones impuestas por los secuestradores.

La policía española, a través de las conversaciones telefónicas de los secuestradores, que conserva grabadas, y de la carta escrita que dirigieron, tiene fundadas sospechas de que éstos son suramericanos y, aunque en un principio pensaban que pudiera tratarse de delincuentes de "baja estofa", tal hipótesis comienza a ser descartada, puesto que "los prudentes movimientos de éstos hacen suponer que saben muy bien lo que llevan entre manos y no están dispuestos a cometer ningún error", según afirmaba una fuente policial próxima a las investigaciones.

El pasado fin de semana se produjo en Madrid un importante despliegue policial, ya que se esperaba que los sec:uestradores podrían ponerse en contacto con la familia Iglesias. La policía sospechaba que éstos podrían encontrarse en algún barrio periférico de la capital de España. La operación no dio resultado, Mientras tanto, la investigación, que comenzó a ser llevada por el grupo 111 de la Brigada Regional de Policía Judicial, se desibordó a medida que pasaban los días, yel sábado pasado se encontraban trabajando en el caso la mayoría de los inspectores de todas las brigadas regionales centradas en Madrid, así como algunos fontaneros -expertos en transmisienes y sistemas de escucha- de la Brigada Central de Información que normalmente se ocupan de los asuntos relacionados con el terrorismo.

Asimismo, el jefe Superior de Policía de Madrid, Gabriel García Gallego, ordenó la semana pasada un fuerte rastreo por todos los barrios periféricos de Madrid, así como zonas residenciales, ya que tenía la sospecha de que los secuestradores continuaban en Madrid, operación que tampoco dio resultado. Otra pista que falló fue la detención de un suramericano que, en un principio, la policía sospechaba que podría tener relación con el caso, pero esta pesquisa tampoco llevó a la solución del asunto.

La fórmula de pago del rescate no ha sido establecida aún, y éste parece ser el principal problema a la hora de dar por finalizado este suceso con un final feliz para la víctima, que está secuestrada hace ya dos semanas.

La familia exige una prueba

La familia del secuestrado, por su parte, ha exigido una prueba fehaciente de que el doctor Iglesias sigue vivo, antes de entregar ningún rescate, para asegurarse de que, efectivamente, están tratando con los autores del secuestro y que la víctima se encuentra perfectamente, sin haber sufrido daños.

Las fuentes informantes han añadido que entre las posibilidades que se barajan como más efectivas para conocer el estado de salud del padre de Julio Iglesias figuran el poder hablar con él por teléfono, directamente o comunicarse a través de cintas magnetofónicas. Otra prueba que podría servir a la familia para demostrar el buen estado de salud del doctor consiste en una fotografía de éste sosteniendo un periódico del día.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En