La carta de "dimisión irrevocable"

Este es el texto de la carta de dimisión dirigida por Fernando Castedo, director general de RTVE, al presidente Calvo Sotelo«Querido presidente. Quiero, por medio de estas líneas agradecerte ante todo la cordialidad de la reunión que ayer noche mantuvimos contigo en tu despacho el presIdente de UCD y yo ».

« Quiero también manifestarte que, ante vuestra petición formal de que presentara mi dimisión del cargo de director general del Ente Público RTVE, por tener ambos discrepancias políticas con mi gestión al frente de dicho organismo, he decidido acceder a ello. En consecuencia, conside...

Este es el texto de la carta de dimisión dirigida por Fernando Castedo, director general de RTVE, al presidente Calvo Sotelo«Querido presidente. Quiero, por medio de estas líneas agradecerte ante todo la cordialidad de la reunión que ayer noche mantuvimos contigo en tu despacho el presIdente de UCD y yo ».

« Quiero también manifestarte que, ante vuestra petición formal de que presentara mi dimisión del cargo de director general del Ente Público RTVE, por tener ambos discrepancias políticas con mi gestión al frente de dicho organismo, he decidido acceder a ello. En consecuencia, considera formalmente solicitada con carácter irrevocable mi dimisión de dicho cargo».

«No ha sido una decisión fácil. Pero si fui nombrado por un Gobierno de UCD y por mi condición de miembro de dicho partido, cualquiera que sea mi valoracion personal y política de vuestra petición y de vuestras consideraciones para hacérmela, me parece obligado, por razones de coherencia en los compromisos que se adquieren al ingresar en un partido político adoptar la decisión que ahora asumo».

«Pienso que, en cualquier caso, algo importante ha cambiado en UCD desde aquellos tiempos en que -como sabes- contribuimos un poco a crearla, y lo siento. Pienso también que algo importante ha cambiado desde que se me nombró, pues se me exige la dimisión por haber hecho aqueIlo para lo que se me nombró. Pero estas son, querido presidente, reflexiones que he de plantearme en los próximos días, ya más libre del cotidiano trabajo en Prado del Rey. Un cordial abrazo. Fernando Castedo. Madrid, 23 de octubre de 1981 ».