Rafael Termes: "Los empresarios deberían manifestarse con pancartas contra el aumento de gasto público"

«Los empresarios tendrían que manifestarse con pancartas contra el aumento del gasto en el sector público. Yo soy contrario, totalmente contrario, a inyectar dinero en el sector público para que actúe de locomotora de la economía española. Es una idea socialista que no comparto, y lo que me extraña es que el Gobierno, a veces, ha adoptado posturas más propias del PSOE que de su partido», afirmó Rafael Termes, presidente de la Asociación Española de la Banca Privada, en una conferencia de Prensa celebrada en Valladolid.

El máximo dirigente de la patronal bancaria se desplazó a Valladolid...

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«Los empresarios tendrían que manifestarse con pancartas contra el aumento del gasto en el sector público. Yo soy contrario, totalmente contrario, a inyectar dinero en el sector público para que actúe de locomotora de la economía española. Es una idea socialista que no comparto, y lo que me extraña es que el Gobierno, a veces, ha adoptado posturas más propias del PSOE que de su partido», afirmó Rafael Termes, presidente de la Asociación Española de la Banca Privada, en una conferencia de Prensa celebrada en Valladolid.

El máximo dirigente de la patronal bancaria se desplazó a Valladolid para pronunciar una conferencia titulada La financiación de las empresas por la banca privada, durante la jornada que al Ferial Nacional de Muestras de Castilla y León dedican las cámaras de comercio. En la parte final de su intervención, Rafael Termes indicó que «nos hallamos en una fase de restricción del crédito privado que, digan lo que digan los defensores del déficit estatal, resulta expulsado por las desbordantes necesidades de financiación del sector público, cuyo gasto, principalmente de consumo, está rebasando el 35% del PIB, c6n una aceleración alarmante de la socialización de la economía, como lo prueba que en 1974 esta relación era del 25%».«Como ha dicho el gobernador del Banco de España», añadió, «en las condiciones actuales, es decir, con el desbordado déficit del sector público, el desequilibrio en la balanza de pagos y el diferencial de inflación con el exterior, no se podría permitir una reducción en los tipos de interés interno. Esta falta de demanda de crédito, que dichas condiciones provocan, refleja lógicamente la atonía de la actividad empresarial privada, que no será posible relanzar mientras no cambien, en forma clara y estable, las políticas económicas del Gobierno, y mientras una parte importante y creciente de los recursos internos y externos se destinen al consumo público y a transferencias improductivas».

El presidente de la Asociación Española de la Banca Privada insistió en estos ataques contra los gastos en el sector público durante la conferencia de Prensa mantenida después de su discurso. «El primer test importante para saber la orientación que se va a dar a la política económica lo tendremos en los presupuestos del Estado. Cuando el comité ejecutivo de la CEOE visitó al presidente del Gobierno le dijo que se admitirían los 700.000 millones de gasto público del Estado siempre que el total tenga como techo los 900.000 millones; porque, claro, el sector público no es sólo el Estado, sino también organismos autónomos, corporaciones, etcétera, y si se, frena por un lado para que salga por otro es como esconder el polvo debajo de las alfombras».

Rafael Termes considera que la iniciativa privada, «si recibe apoyo en forma de medidas generales, laborales y fiscales», puede desarrollarse y salir por sí sola de la crisis. «Pero es un error», añadió, «pensar que la única solución es el dinero barato».

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