El nuevo vicario general de los jesuitas es un experto en el mundo de la educación

El padre Vincent O'Keefe, que en este momento rige la Compañía de Jesús como vicario del prepósito general, el padre Pedro Arrupe, hospitalizado en una clínica romana tras haber sufrido el viernes.pasado una trombosis cerebral, nació en Jersey City hace 61 años. Estudió en las universidades jesuíticas de Georgetown; de Lovaina, en Bélgica; de Mónaco, en Alemania, y de la Gregoriana, en Roma. Fue ordenado sacerdote en 1950 y enseñó teología en los colegios más importantes de Nueva York, como el Regis High School, en el Woodstock y en la Fordham University.Actualmente, el padre O'Keefe era uno d...

El padre Vincent O'Keefe, que en este momento rige la Compañía de Jesús como vicario del prepósito general, el padre Pedro Arrupe, hospitalizado en una clínica romana tras haber sufrido el viernes.pasado una trombosis cerebral, nació en Jersey City hace 61 años. Estudió en las universidades jesuíticas de Georgetown; de Lovaina, en Bélgica; de Mónaco, en Alemania, y de la Gregoriana, en Roma. Fue ordenado sacerdote en 1950 y enseñó teología en los colegios más importantes de Nueva York, como el Regis High School, en el Woodstock y en la Fordham University.Actualmente, el padre O'Keefe era uno de los cuatro asistentes generales de la compañía. Su especialidad era la educación, uno de los problemas más delicados del mundo jesuítico.

El padre O'Keefe ha actuado siempre en plena armonía con el padre Arrupe por lo que se refiere a las ideas maestras del gobierno de la compañía. Es uno de sus hombres de confianza. El nuevo vicario general es un jesuita abiertamente norteamericano, con una gran carga de simpatía y de cordialidad humana. Pero, como todos los asistentes generales de la com pañía, ha vivido estos años más bien en la sombra de un trabajo importante, pero oculto.

La verdad es que su nombramiento como vicario ha sido sólo ocasional. El padre Arrupe, cuando sale de viaje, deja siempre a uno de los cuatro asistentes generales como vicario suyo en Roma. Esta vez, al irse a las islas Filipinas, había elegido al padre O'Keefe como su vicario, y al enfermarse ha sido el mismo padre Arrupe quien ha pedido que continúe sustituyéndole duzante su enfermedad.