Terrorismo de Estado

No cabe ya ninguna duda: el bombardeo sangriento de Beirut constituye, más que una operación de represalias, un acto deliberado de terrorismo de Estado.El propio Beguin lo ha admitido prácticamente afirmando, unas horas después del intensivo bombardeo de la capital, que las zonas de la población civil en el Líbano no serán protegidas. (...)

Uno se pregunta. qué ha podido empujar al primer ministro israelí a decidir tal operación. ¿Era necesario vengar a los tres inocentes israelíes muertos en Nahariya organizando una auténtica matanza de palestinos y libaneses igual de inocentes? (...)...

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No cabe ya ninguna duda: el bombardeo sangriento de Beirut constituye, más que una operación de represalias, un acto deliberado de terrorismo de Estado.El propio Beguin lo ha admitido prácticamente afirmando, unas horas después del intensivo bombardeo de la capital, que las zonas de la población civil en el Líbano no serán protegidas. (...)

Uno se pregunta. qué ha podido empujar al primer ministro israelí a decidir tal operación. ¿Era necesario vengar a los tres inocentes israelíes muertos en Nahariya organizando una auténtica matanza de palestinos y libaneses igual de inocentes? (...)

Todo parece indicar que Beguin ha decidido cerrar la puerta a toda solución política razonable del problema palestino.

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¿No ha afirmado él muchas veces que el único sitio en donde estaría dispuesto a enfrentarse con los «terroristas de la OLP» sería en el «campo de batalla»? (...)

20 de julio

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