PAIS VALENCIANO

Quema de camiones y furgonetas en Valencia

Ocho camiones y furgonetas de transporte, por lo menos, han sido quemados en los últimos días, en Valencia, por pirómanos cuya identidad, hasta el momento, se desconoce. El último de ellos se produjo a primeras horas de la tarde del martes, cuando una furgoneta Ebro, cargada de virutas de madera, ardió a la altura del número 113 de la calle de Guillén de Castro.En ninguno de los casos registrados por la Policía Municipal se produjeron víctimas, ya que el fue go se redujo en corto espacio de tiempo. En tres ocasiones, sin embargo, las consecuencias pudieron haber sido trágicas, ya que los condu...

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Ocho camiones y furgonetas de transporte, por lo menos, han sido quemados en los últimos días, en Valencia, por pirómanos cuya identidad, hasta el momento, se desconoce. El último de ellos se produjo a primeras horas de la tarde del martes, cuando una furgoneta Ebro, cargada de virutas de madera, ardió a la altura del número 113 de la calle de Guillén de Castro.En ninguno de los casos registrados por la Policía Municipal se produjeron víctimas, ya que el fue go se redujo en corto espacio de tiempo. En tres ocasiones, sin embargo, las consecuencias pudieron haber sido trágicas, ya que los conductores se encontraban durmiendo en la cabina del camión, pero se salvaron al ser advertidos a tiempo.

El último lunes, de madrugada también, ardieron los troncos de un camión Avia que se encontraba estacionado en la misma calle, a la altura del número 77. Como en el caso anterior, se está procediendo a investigar el origen del fuego. No se descarta la intervención de algún perturbado mental con obsesiones pirómanas.

Las sospechas sobre los seis camiones quemados en la misma noche del pasado día 8 van en otra dirección, según fuentes de la Policía Municipal. Los camiones, de marca Barreiros y Pegaso, se encontraban estacionados en la zona próxima al Mercado de Abastos, donde se encuentran numerosas agencias de transportes. Habitualmente, los camiones aparcan por la noche para poder cargar o descargar a primera hora del día. La incomodidad que ello supone a los vecinos, ante la falta de espacios para aparcar, y el ruido que ocasiona el movimiento de mercancías podrían ser algunas de las causas, según estas fuentes, de las actuaciones de los pirómanos.

«La facilidad de los valencianos para quemar las fallas», señalaron estas fuentes, «no significa que la piromanía sea un hecho más frecuente en Valencia». Hace unos años se registraron varios incendios de coches, que resultaron ser obra de un perturbado mental,

Fuentes de la Jefatura Superior de Policía, en relación a la quema masiva del día 8, señalaron que no parecía tener motivaciones políticas. Los daños evaluados en los seis camiones, que ardieron sucesivamente en cuatro horas, espaciados uno del otro, ascienden a unas 300.000 pesetas.

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