Tribuna:

Teléfonica salvó el indice

Ha terminado la semana con unas sesiones escasamente interesantes, en las que los compradores siempre actuaron en posición de manifiesta inferioridad frente a unos vendedores que, si no aportaron unos volúmenes excesivos de papel, sí se mostraron mucho más activos que sus contrarios.En el caso concreto del mercado madrileño hubo de recurrirse a la tradicional y providencial subida de la Telefónica para que el índice general no reflejase pérdidas en una sesión que se consideraba de puro trámite.

El grupo bancario se vio más descongestionado de oferta, hasta el punto de que la propia «caj...

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Ha terminado la semana con unas sesiones escasamente interesantes, en las que los compradores siempre actuaron en posición de manifiesta inferioridad frente a unos vendedores que, si no aportaron unos volúmenes excesivos de papel, sí se mostraron mucho más activos que sus contrarios.En el caso concreto del mercado madrileño hubo de recurrirse a la tradicional y providencial subida de la Telefónica para que el índice general no reflejase pérdidas en una sesión que se consideraba de puro trámite.

El grupo bancario se vio más descongestionado de oferta, hasta el punto de que la propia «caja » recomendaba en muchos casos las repeticiones. El Santander volvió a resultar el único valor del sector que contó con una demanda apreciable y de nuevo aplicó criterios restrictivos a la hora de marcar su cambio, atendiendo a la demanda del mercado en un porcentaje ligeramente superior al 30%.

Las eléctricas continuaron siendo, en su conjunto, el sector más castigado por los vendedores. Los constantes rumores sobre la aparición de paquetes fantasmas ofrecidos por el Banco de España, que en muchos casos resultan imaginarios, y la presencia más real de acciones de estas sociedades, que ofrecen algunas de las entidades y gestoras que negociaron directamente con el banco emisor su adquisición, vienen generando un ambiente de zozobra en los corros donde se negocian estos valores, cuyas cotizaciones se ven sometidas a unos procesos casi constantes de deterioro.

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