Normalización de relaciones entre los partidos comunistas de España y Portugal
Santiago Carrillo y Alvaro Cunhal participarán conjuntamente en mítines del Partido Comunista Portugués (PCP) en Lisboa y Oporto y en actos organizados por el PCE de Madrid y Barcelona.
La noticia, divulgada oficialmente por el PCP, merece un título a tres columnas en la primera página del diario procomunista Diario de Lisboa, que se interroga acerca de una posible mejoría de las relaciones entre los dos PC de la Península Ibérica.
La respuesta a la pregunta es evidente para quien conoce la extrema frialdad que caracterizaron desde 1974, las relaciones entre amb...
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Santiago Carrillo y Alvaro Cunhal participarán conjuntamente en mítines del Partido Comunista Portugués (PCP) en Lisboa y Oporto y en actos organizados por el PCE de Madrid y Barcelona.
La noticia, divulgada oficialmente por el PCP, merece un título a tres columnas en la primera página del diario procomunista Diario de Lisboa, que se interroga acerca de una posible mejoría de las relaciones entre los dos PC de la Península Ibérica.
La respuesta a la pregunta es evidente para quien conoce la extrema frialdad que caracterizaron desde 1974, las relaciones entre ambos partidos. Basta recordar que Santiago Carrillo fue invitado de honor del congreso del Partido Socialista Portugués en 1974, pero no participó nunca ni en el congreso del PC ni en la fiesta del órgano oficial del partido de Cunhal, Avante.
La nota divulgada ayer por la dirección del PCP revela que fue la parte portuguesa quien tomó la iniciativa, en diciembre pasado, de proponer al PCE un intercambio de visitas de delegaciones dirigidas por los respectivos secretarios generales, a realizar en abril o mayo. El PCE aceptó esta proposición, pero aplazando su realización para el segundo semestre de 1981.
La inmediata publicidad dada en Lisboa a la aceptación de los comunistas españoles suscita curiosidad en Portugal. No puede ser interpretada como un cambio repentino de actitud de Cunhal en relación al eurocomunismo, en general, y a las tesis de Carrillo, en particular. A su regreso, hace dos semanas, de una visita a Grecia y Yugoslavia, el secretario del PCP se permitió una reflexión irónica sobre el descalabro de las tesis de algunos partidos comunistas europeos, al llamar la atención de los periodistas sobre el hecho de que «las tesis eurocomunistas estaban pasando de moda en todas partes».