La policía recupera joyas robadas valoradas en 180 millones de pesetas

Piezas por un valor aproximado de 180 millones de pesetas han sido recuperadas tras una operación conjunta de la policía de Valencia y de Roma, que supuso además la detención de ocho personas implicadas en recientes atracos realizados en diversas ciudades españolas del litoral mediterráneo. El valor total de lo robado por la banda supera los quinientos millones de peseta.

La operación policial se montó a raíz de la sustracción en numerosas ciudades de la costa mediterránea de joyas de establecimientos, a los que se entraba por el procedimiento directo del atraco o realización de agujero...

Piezas por un valor aproximado de 180 millones de pesetas han sido recuperadas tras una operación conjunta de la policía de Valencia y de Roma, que supuso además la detención de ocho personas implicadas en recientes atracos realizados en diversas ciudades españolas del litoral mediterráneo. El valor total de lo robado por la banda supera los quinientos millones de peseta.

La operación policial se montó a raíz de la sustracción en numerosas ciudades de la costa mediterránea de joyas de establecimientos, a los que se entraba por el procedimiento directo del atraco o realización de agujeros en la pared. Las primeras sospechas, detectaron la actuación en esta área de una banda de atracadores italianos y suramericanos vinculados a la Mafia italiana.El pasado 9 de noviembre, a raíz de las primeras investigaciones, la policía de Valencia detuvo a los italianos Mario Botoni y Damiano Barranca, que utilizaban diversos domicilios como lugar de residencia en esta región. El primero, según informaron fuentes policiales, alquiló, con los nombres falsos de Sergio Santilli y Bartolomeo Palermo, diversos coches, uno de ellos un Seat 131, que se le ocupó.

Dentro del vehículo se encontró un equipo completo para efectuar los atracos, que constaba de sopletes, botella de oxígeno, cizallas y palanquetas, instrumentos todos ellos para perforar paredes y forzar cajas fuertes. Por su parte, el coche de Damiano Barranca, con matrícula de Roma V-67159, disponía de un departamento secreto para ocultar las joyas al atravesar los puestos fronterizos.

Tras estas primeras pesquisas, la policía española se trasladó a Roma, donde detuvo al norteamericano Narciso Colón Cruz, también conocido por el nombre de Sergio Cabral de Vargas, junto al italiano Franco Porte, quienes tenían en su poder veinticinco paquetes que contenían numerosas joyas.

Las investigaciones en Italia concluyeron con la posterior detención de los restantes componentes de la banda: Salvatore Badagliacco, Yolanda Faddal, Giusepina Diamanti y Elena Strengaci, a excepción de un último miembro del grupo, Giancarlo Santilli, que todavía continúa en libertad.

El botín de los atracos en los que se ha confirmado la participación de esta banda asciende a quinientos millones de pesetas, si bien hasta el momento sólo se han recuperado joyas valoradas en 180 millones, y varios coches. Parte de las piezas recuperadas fueron mostradas a los medios, informativos en el Gobierno Civil, donde se dio cuenta en conferencia de Prensa de los resultados de la operación.