España y Marruecos inician estudios para construir un enlace en el estrecho de Gibraltar

Decía Napoleón que cuando un proyecto interesa se le encarga al experto que pueda realizarlo. Cuando no interesa, se crea una comisión lo más amplia y numerosa posible. Esta referencia no procede de ningún periodista escéptico, sino del ingeniero Alejandro Goicoechea, inventor del Talgo, como gustan llamarle en Marruecos, y una de las personalidades técnicas de mayor relevancia en la apreciación de los marroquíes que han acudido al recién clausurado coloquio de Tánger sobre el enlace fijo a través del estrecho de Gibraltar.

Amplia y grande ha sido la asistencia de expertos, de cerca de ...

Decía Napoleón que cuando un proyecto interesa se le encarga al experto que pueda realizarlo. Cuando no interesa, se crea una comisión lo más amplia y numerosa posible. Esta referencia no procede de ningún periodista escéptico, sino del ingeniero Alejandro Goicoechea, inventor del Talgo, como gustan llamarle en Marruecos, y una de las personalidades técnicas de mayor relevancia en la apreciación de los marroquíes que han acudido al recién clausurado coloquio de Tánger sobre el enlace fijo a través del estrecho de Gibraltar.

Amplia y grande ha sido la asistencia de expertos, de cerca de veinte países, que, a invitación del Gobierno marroquí, discutieron, en Tánger, entre los días 30 de octubre y 1 de noviembre, sobre la ya mencionada idea de unir Europa con Africa. En contra de la opinión de Napoleón, el número de participantes en el coloquio de Tánger, lejos de ser una rémora, ha permitido, en esta fase de la idea (que es de mero intercambio de opiniones para aclarar cómo abordar un proyecto de tamaña magnitud), que los organizadores marroquíes y españoles salgan con más optimismo.El coloquio de Tánger, después de asegurar en sus recomendaciones finales que ese enlace permitiría desarrollar de una manera realista la cooperación entre los dos continentes, decidió crear una comisión mixta que debe examinar los siguientes aspectos del mismo:

1. El régimen jurídico del espacio marítimo en el Estrecho, en particular desde el punto de vista del estado actual del Derecho Positivo Internacional, y las legislaciones respectivas de los dos estados ribereños -España y Marruecos-, y la armonización de estas dos legislaciones con vistas a adoptar un punto de vista común en el plano regional e internacional.

2. El impacto del régimen jurídico en la realización del proyecto.

3. Elaboración de una convención bilateral hispano-marroquí sobre el enlace.

4. Recopilación y sistematización evaluada de todos los datos técnicos y propuestas presentadas de enlace.

A esta comisión mixta serán invitados a unirse expertos internacionales e instituciones también internacionales competentes.

Entre las propuestas que han alcanzado un eco particular en medios marroquíes, quizá por que se salen de lo rutinario, está la del ingeniero Alejandro Goicoechea, que parte de una concepción totalmente diferente del objetivo estratégico del enlace fijo y pretende que. considerando que el problema de la humanidad a partir del año 2000 será el de la energía, y no el del transporte, propone la construcción de una presa gigantesca en el Estrecho, por encima de la cual pase el tráfico rodado, ferroviario y vial.

En lo que a la represa concierne, 1.600 turbinas, accionadas por la corriente que provoca la diferencia de un metro en el nivel del Atlántico y del Mediterráneo, producirán, según Goicoechea, energía suficiente como para abastecer a España y Marruecos, susceptible de interesar por este motivo a los inversionistas privados.

Los problemas que plantea esta obra, calificada, para disgusto de Goicoechea, de «faraónica», son numerosos e importantes. Para empezar, por las limitaciones y trabas que supondría para la libertad de navegación en el Estrecho. Este problema, de acuerdo con el proyectista, quedaría obviado con la construcción de dos canales del lado español y dos del lado marroquí para el tráfico marítimo.

Las otras propuestas son las ya clásicas y conocidas de túnel subterráneo, tubo submarino anclado, tubo submarino flotante y puente. Según un folleto distribuido durante el coloquio por la oficina marroquí del comité mixto, el proyecto de tubo submarino inmerso y anclado al fondo plantea problemas técnicos innegables, «por lo que parece difícil, en la situación actual, interesarse en tal proyecto».

Las primeras estimaciones del coste del proyecto restante, túnel subterráneo, naturalmente aproximadas dada la fase en que se encuentran las ideas, se elevan a 6.000 millones de dlrhams, es decir, al cambio actual, unos 1.500 millones de dólares.

Este aspecto económico, así como el de la financiación, es el que interesó particularmente a los periodistas invitados al coloquio. La única referencia por el momento es la expuesta por el ingeniero japonés Koichi Aoki, de la Japan RalIway Construction, quien dijo que el túnel bajo el mar entre la isla de Okkaido y el territorio continental, por Honshu, aún en construcción, y que, con sus 53,9 kilómetros de longitud. será el más largo del mundo, fue previsto en 1972 que costaría unos 1.200 millones de dólares, que, actualizados, serían unos 2.300 millones de dólares.

Sobre los aspectos financieros habló a los periodistas, en la sesión de clausura, el ministro español de Transportes, José Luis Alvarez. Respondiendo a una pregunta de los informadores marroquíes, que le reprochaban un cierto supuesto pesimismo de España, frente al optimismo de Marruecos, dijo que no se trata de pesimismo, sino de la natural preocupación -que Marruecos, por otra parte, comparte- ante el coste de una obra de esta envergadura.

José Luis Alvarez recordó que otro proyecto de túnel bajo el canal de La Mancha, que debe unir a dos países en un estadio de desarrollo industrial mucho más avanzado y con unas cotas de intercambios comerciales muy superiores a las previsibles a través del estrecho de Gibraltar, está paralizado precisamente por consideraciones financieras.

A pesar de la indudable incidencia que este enlace fijo ha de tener a largo plazo en Argelia, si llega a realizarse, no hubo ningún representante oficial del Gobierno argelino en este coloquio. Uno de los objetivos del enlace fijo sobre Gibraltar, a pesar de ello, es enlazar la red de carreteras europeas con las; africanas, en particular las que unirán en el futuro las redes de carreteras y de ferrocarril entre los; países del Magreb con las de Egipto, que necesariamente pasan por Argelia.

De ello resultaría una especie de cinturón vial del Mediterráneo, a completar en el futuro con otro que debe llevar a los países del Africa occidental, Mauritania, Senegal, Gambia, Guinea, Sierra Leona, Costa de Marfil, Ghana, que tomando dirección Norte, enlazaría, a partir de Nigeria, con la transahariana, para no aislar a Níger y Mali.